Cine
54 / Tomado de yahoo.es
Quizás no la
conozcas, pero Zaira Wasim es una de las actrices más exitosas de Bollywood.
Con apenas 18 años, Zaira se había asentado entre los intérpretes más
solicitados en la millonaria industria de la India, pero, de repente, ha
sorprendido a sus fans al anunciar su retiro anticipado.
Wasim alcanzó
el estrellato en 2016 con Dangal, la película más taquillera
en la historia del cine de Bollywood con 253 millones de euros ($290 millones)
recaudados, y le valió el Premio Nacional a la mejor actriz de reparto. Desde
entonces apareció en otra producción titulada Secret Superstar, donde
ya era la protagonista y también fue otra de las películas más exitosas de la
industria, y tiene otras dos en desarrollo. Una acompañando a una gran estrella
como Priyanka Chopra. Pero, al parecer, serían las últimas.
Es más, en
2017 recibió el Premio Nacional Infantil por un logro excepcional de manos del
presidente de India.
Pero a lo
largo del fin de semana dio la noticia al mundo: se retira para
centrarse de lleno en su vida como devota musulmana. “El viaje ha sido
agotador, una batalla con mi alma por mucho tiempo” escribió en
Facebook.
Asegura que
le llevó cinco años en la industria para darse cuenta de que la fama no era
para ella. “Quiero confesar que no soy realmente feliz con esta identidad,
por ejemplo, en mi línea de trabajo. Por mucho tiempo he sentido que luchaba
por ser otra persona” añadió.
Afirma que se
dio cuenta de que no pertenecía al mundo de la fama cuando alcanzó una edad que
la obligaba a explorar y descubrir sus deseos por sí misma a medida que
intentaba adaptarse a su nuevo estilo de vida. “Aunque parezca encajar perfectamente, no
pertenezco”.
“La
industria trajo mucho amor, apoyo y aplausos, pero también me llevó por un
camino de ignorancia a medida que silenciosa e inconscientemente salía de mi fe
[…] Mientras seguía trabajando en un ambiente que continuamente interfería con
mi fe, mi relación con la religión se vio amenazada” sentencia.
A pesar de
llevar pocos años en la industria y haber hecho pocas películas, pero
suficientes como para coronarla como una de las promesas más taquilleras de
Bollywood, Zaira ya experimentó la parte más dura de la fama. Nasim
nació en el seno de una familia musulmana en el Valle de Cachemira, al sur de
los Himalayas, y desde que alcanzara el éxito también fue víctima de amenazas
y trolling en las redes. Primero por cortarse el cabello para
su debut cinematográfico, siendo criticada por ser “anti-islámica” por aparecer
en una película. Meses más tarde recibió amenazas de muerte por reunirse con la
jefe de ministros Mehbooba Mufti, quien describió a la actriz como “un modelo a
seguir cachemira”. Y a finales de ese mismo año, y aun siendo menor de edad,
fue víctima de las críticas de nuevo por acusar a un hombre de tocarla en el
cuello inapropiadamente cuando estaba dormida en un vuelo.
Desde que
hiciera su revelación el pasado sábado, su perfil se ha inundado de comentarios
con aquellos que apoyan su decisión de centrar su atención en el islam y
aquellos que critican que decidiera que la religión fuera su razón para dejarlo
todo.
