NDP / Para
Orangel Palma, dirigente nacional de Alternativa 1 y JUNTOS, la llegada del “socialismo”
ha traído consigo el colapso de los servicios básicos para los venezolanos, “esta crisis se profundiza con el pasar del
tiempo ante la mirada apática y la inacción de los entes regionales y
municipales correspondientes, que defienden este modelo político fracasado y no
defienden a los ciudadanos en lo más elemental”, expresó.
Las
calles son hoy día el escenario de protestas de ciudadanos que a diario sufren
la precariedad por la falta de alimentos, medicinas, agua, electricidad,
efectivo y una hiperinflación galopante que a diario pulveriza el salario de
los trabajadores, “esta crisis ya
traspasó el umbral de las soluciones puntuales o coyunturales, se ha convertido
en un inconveniente de talla estructural, que requiere constituir una serie de
políticas que permitan restablecer la senda correcta para el progreso y el
bienestar de todos”.
Desde
el punto de vista ideológico, no hay diferencia sustancial entre socialismo y comunismo.
Con la implementación del socialismo, el gobierno destruyó el sistema del estado,
el sistema político y, por supuesto, el sistema económico.
El
socialismo echa por tierra la iniciativa personal y la reemplaza por un
absoluto o alto grado de control del estado, el cual siempre tiende al
totalitarismo, la destrucción de la libertad, la arbitrariedad y la
represión, “la imposición
gubernamental es la señal inequívoca del fracaso de este modelo, que no logró
consolidar un proyecto social de cara a las necesidades de los ciudadanos”.
El
dirigente precisó que “este gobierno a
través del socialismo se burla de la patria, de todos los venezolanos y no le
importa destruir una gran nación como lo está haciendo actualmente
con Venezuela”.
Nadie
sabe con certeza qué sucederá en el país conducido por tanta improvisación e
irresponsabilidad, la única certeza es el fracaso absoluto del llamado
socialismo del siglo XXI, en Venezuela como tal y en Cuba bajo otro nombre. Concluyó.