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02 junio, 2014

EDITORIAL


LA CONSTITUCIÓN ES PARA CUMPLIRLA NO SOLO PARA MOSTRARLA
.
``El estado garantizará una justicia gratuita, accesible,
imparcial, idónea, transparente, autónoma, independiente,
responsable, equitativa, y expedita, sin dilaciones
indebidas, ni formalismos o reposiciones inútiles´´
 Segundo aparte del Artículo 26 de la CRBV   


`` Dentro de la constitución todo, fuera de la constitución nada´´, solía decir el difunto presidente Hugo Chávez, pero resulta que en nuestro país la constitución es solo para enseñarla en público. Si algo funciona mal en la Venezuela de estos tiempos es, precisamente, el Poder Judicial que para nada cumple con lo establecido con el artículo 26 de la ``bolivariana´´ citado al inicio de esta nota. Que la justicia es gratuita, independiente, equitativa y expedita no lo cree nadie. Las recientes (¡y las no tan recientes también!) decisiones del Tribunal Supremo Justicia ratifican esa creencia colectiva en la sociedad venezolana; ni los ``chavistas´´ más recalcitrantes piensan que la justicia en nuestro país funciona medianamente bien. He allí uno de nuestros problemas fundamentales. El maltrecho sistema judicial que hoy tenemos causa enormes perjuicios a la sociedad, buena parte, por ejemplo, del escandaloso aumento de la criminalidad los especialistas se lo atribuyen a la impunidad que genera la crisis en la judicatura (cerca del 93% de los homicidios quedan impunes). Por su puesto, la fiscalía también tiene una alta cuota de responsabilidad en este asunto. Se trata de un ente partidizado, al servicio de la fuerza política gobernante, con un bajo nivel profesional y esto le ha hecho un daño terrible a la nación. Ahora, no es solo en materia judicial que la constitución no se cumple. En Venezuela el derecho a la salud es prácticamente inexistente, el Estado no sanciona, como está obligado, a los funcionarios que comenten delitos contra los derechos humanos y mucho menos indemniza a las víctimas, aquí el Tribunal Supremo de Justicia conculcó el derecho a la protesta y la educación de la que disponemos es de una calidad que deja mucho de que desear, solo para dar algunos ejemplos. En fin, por ahora, la constitución es simplemente un ``librito´´ detrás del que se escudan burócratas incompetentes para vender un proceso de capa caída que ha significado una gran decepción para millones de compatriotas. Para nuestra desgracia, del dicho al hecho sigue habiendo mucho trecho en cuanto al acatamiento de las normas constitucionales. Vendrán tiempos mejores.