ABC.es
ABC entra en un campo de refugiados de esta perseguida etnia musulmana, confinada por el Ejército en guetos
Durante siete generaciones, la familia de Mohamad Hashim, musulmán de la etnia Rohingya, había vivido en Birmania en relativa armonía con sus vecinos budistas. Como director de un secadero de pescado en Thandoli, en el estado occidental de Rakhine, disfrutaba de una cómoda posición económica que le había permitido tener ocho hijos. Pero su existencia se truncó de la noche a la mañana cuando, en junio de 2012, estallaron unos graves disturbios interétnicos por la violación de una mujer budista a manos de varios musulmanes. Durante todo ese verano, los enfrentamientos entre las dos comunidades dejaron más de 150 muertos, 2.500 casas quemadas entre ambos bandos y 140.000 Rohingyas desplazados que fueron confinados por el Gobierno birmano en campos de refugiados de los que no pueden salir.
ABC entra en un campo de refugiados de esta perseguida etnia musulmana, confinada por el Ejército en guetos
Durante siete generaciones, la familia de Mohamad Hashim, musulmán de la etnia Rohingya, había vivido en Birmania en relativa armonía con sus vecinos budistas. Como director de un secadero de pescado en Thandoli, en el estado occidental de Rakhine, disfrutaba de una cómoda posición económica que le había permitido tener ocho hijos. Pero su existencia se truncó de la noche a la mañana cuando, en junio de 2012, estallaron unos graves disturbios interétnicos por la violación de una mujer budista a manos de varios musulmanes. Durante todo ese verano, los enfrentamientos entre las dos comunidades dejaron más de 150 muertos, 2.500 casas quemadas entre ambos bandos y 140.000 Rohingyas desplazados que fueron confinados por el Gobierno birmano en campos de refugiados de los que no pueden salir.