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05 abril, 2025

Wendy Suzuki, neuróloga en la Universidad de Nueva York: “El ejercicio intenso es imprescindible para la salud del cerebro”

Una de las investigadoras del cerebro más reconocidas internacionalmente revela las conclusiones de sus estudios para la mejora de la salud del cerebro

Pau Ortiz

En una sociedad vive a ritmo frenético y absorbida por las pantallas, la salud mental pasa cada vez más al primer plano informativo. En este sentido, en una entrevista recenreciente, la neuro científica Wendy Suzuki y autora de Healthy brain, happy life defendió la idea de un “cerebro grande, musculoso y esponjoso”, no como metáfora graciosa, sino como objetivo real y alcanzable a nivel de salud. “Un cerebro sano es sinónimo de una vida más feliz”, asegura. ¿La clave? Dar al cerebro la atención que merece: es la estructura más compleja del universo… y la llevamos dentro de la cabeza".

La clave: sesiones periódicas de ejercicio intenso

Los grandes aliados del cerebro, según Suzuki, son dos: el ejercicio físico intenso y la meditación. Actividades aeróbicas que nos suban significativamente el ritmo cardiaco como andar a paso ligero, jugar a fútbol o el ciclismo no solo mejoran el estado de ánimo, sino que también activan el hipocampo y el córtex prefrontal —áreas esenciales para la memoria, la atención y la toma de decisiones. “Cada gota de sudor cuenta, el bombardeo de sangre activa la regeneración celular en nuestro cerebro”, explica la neuróloga, que ha comprobado en sus estudios que 2-3 sesiones a la semana ya generan cambios cognitivos notables.

Herramientas para combatir la ansiedad creciente que vive nuestra sociedad

En este contexto, el deporte se revela como una herramienta poderosa para hacer frente a una de las grandes epidemias de nuestro tiempo: la ansiedad. Wendy Suzuki escribió Good anxiety después de observar un aumento preocupante del malestar emocional en sus estudiantes, mucho antes de la pandemia. Esta ansiedad cotidiana —no clínica—, alimentada por incertidumbres globales y la presión de las redes sociales, afecta cada vez a más personas, especialmente jóvenes.

“Todos tenemos ansiedad, pero nunca lo habíamos vivido con tanta intensidad”, reflexiona. La autora americana ha explicado que el deporte activa de manera natural la producción de dopamina y serotonina, dos moléculas clave para el bienestar emocional. Estas sustancias mejoran el estado de ánimo, reducen el estrés y aumentan la sensación de placer y motivación. “Solo 30 minutos de ejercicio aeróbico pueden tener un efecto similar al de un antidepresivo suave”, ha señalado Suzuki.

Por eso, más allá de terapias clínicas, Suzuki propone estrategias activas para gestionarla: moverse, respirar, conectar con uno mismo. El objetivo no es eliminar la ansiedad, sino transformarla en una fuerza motivadora. En un mundo saturado de noticias alarmantes, notificaciones y comparaciones constantes, cuidar el cerebro no es solo una cuestión de salud: es recuperar la conciencia de uno mismo en medio de tantos inputs informativos.

Tomado de La Vanguardia / España.