El primer Pontífice procedente de
América Latina destaca por su estilo directo, pero su equidistancia con Ucrania
y Rusia fue decepcionante
Es el
primer Papa nacido en América Latina. La misión de Jorge Mario Bergoglio, que
adoptó el nombre de Francisco al ser elegido como sucesor de Benedicto XVI, tras su
renuncia en febrero de 2013, era insuflar nueva vida a la Iglesia católica en
su continente natal, donde los evangélicos y los protestantes avanzan a toda
velocidad. Este martes el Papa Francisco cumple 88 años con una salud
que aún le permite viajes como el que realizó en septiembre a Indonesia, Papúa
Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur. Ha señalado en varias ocasiones que no
se plantea la renuncia, salvo en caso de estar impedido físicamente por una
grave enfermedad.
Después de dos Pontífices centroeuropeos, el polaco Juan Pablo II y el alemán Benedicto XI, el primero en dejar el trono de San Pedro varios años antes de fallecer, el cónclave en el que participaron 115 cardenales designó al cardenal Jorge Mario Bergoglio, lo que generó entusiasmo en su Argentina natal. Jesuita, hincha del Atlético San Lorenzo y de la periferia, el Papa Francisco es cercano al punto de vista del Sur Global.
Justo en la
jornada de su aniversario el Corriere
della Sera ha publicado un avance de una autobiografía firmada
por Carlo Musso que se publica en enero, titulada Spera (Esperanza).
En estas páginas Francisco revela que iba a ser objeto de un atentado cuando
viajó a Irak hace tres años, pero los servicios de inteligencia británicos
alertaron a la policía iraquí y se evitó el ataque, que iba a tener lugar en
Mosul. El Papa Juan Pablo II sufrió
un atentado el 13 de mayo de 1981, cuando saludaba a la multitud en la Plaza
de San Pedro de El Vaticano. El turco Mehmet Ali Ağca le descerrajó cuatro
disparos con una pistola de 9mm. Juan Pablo II sobrevivió y llegó a reunirse
con el terrorista al que perdonó.
Las guerras de hoy: Palestina y
Ucrania
Ningún otro
Papa se habría atrevido a aceptar el regalo de un Belén de madera en el que el
niño Jesús yace sobre una kufiya (pañuelo palestino) por temor a la
reacción de Israel. Fue un presente de artesanos palestinos de Belén, donde
vive una pequeña comunidad cristiana. Durante el encuentro con los portadores
del regalo, Francisco se refirió a la "Palestina martirizada" y
repitió su llamamiento a poner fin a la guerra.
"Recordemos
a los hermanos y hermanas que, justo allí y en otras partes del mundo, sufren
la tragedia de la guerra", señaló el Papa. El niño y el pañuelo palestino,
que estaban en la sala de audiencias, se retiraron, según
informa Associated Press. La tradición es que se coloquen de nuevo el 24 de
diciembre.
Más ruido
causaron sus declaraciones sobre la paz en Ucrania en marzo de este año. En una
entrevista televisiva para la emisora suiza RSI, el Papa pidió a Ucrania que
negociara con el agresor ruso. "La palabra negociar es una palabra
valiente. Cuando ves que estás derrotado, que las cosas no van bien, tienes que
tener el coraje de izar la bandera blanca y negociar", dijo Francisco.
Desde Kiev y otras capitales occidentales se interpretaron las palabras del
Pontífice como una invitación a capitular. Desde el Vaticano luego se insistió
en que se trataba de un llamamiento a la paz.
El
presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, le explicó en su visita al Vaticano
como no puede equipararse entre agresor y víctima. Sin embargo, Francisco
denuncia de forma contundente "la avidez de la industria
armamentística" pero no condena claramente a Rusia como agresor en
Ucrania, ni se refiere a los crímenes cometidos por el Kremlin. En este caso,
adopta ese punto de vista de la izquierda latinoamericana que sigue anclada en
la Guerra Fría y ve a EEUU casi desde la misma óptica que se observa desde
Moscú.
Con los inmigrantes y los pobres
Lo que sí
es cierto es que el Papa Francisco se suele poner en el lugar del inmigrante y
del desfavorecido. Por el Jubileo, que se conmemora el próximo año, ha pedido a
los países más industrializados y a las instituciones internacionales que
condenen la deuda a los más pobres. También lo hizo el Papa Juan Pablo II en
vísperas de 2000.
"Para
tratar de romper el círculo financiamiento-deuda sería necesaria la creación de
un mecanismo multinacional, basado en la solidaridad y la armonía de los
pueblos", dijo el verano pasado ante los participantes de la conferencia
Crisis de deuda en el Sur Global’, impulsada por el Pontífice.
"Llegó
con una actitud revolucionaria, para acercar más a los fieles y hacer una
Iglesia pobre para los pobres", señala en El Tiempo el
vaticanista colombiano Néstor Pongutá. Y añade: "Es un pastor que huele a
oveja".
Su
sensibilidad con los migrantes está fuera de duda en un mundo en el que incluso
desde la Europa de los valores se describen como amenazas. El primer viaje de
su Pontificado, en julio de 2013, fue a Lampedusa, la isla italiana donde paran
miles de personas que buscan un futuro mejor en Europa.
"La
muerte de inocentes, principalmente niños, en busca de una existencia más
serena, lejos de las guerras y la violencia, es un grito doloroso y
ensordecedor que no puede dejarnos indiferentes. Es la vergüenza de una
sociedad que ya no sabe llorar y compadecerse de los demás", advirtió el
Santo Padre, diez años después de aquel viaje. La situación sigue siendo igual
de dramática y las respuestas que dan los Estados cada vez menos solidarias.
Objeto de críticas feroces
De todas
las críticas que recibe, lo que peor lleva es que le digan que "está destruyendo
el Papado", según confesaba al periodista italiano Fabio Marchese
Ragona, autor
de su biografía Vida. Mi historia en la historia. Asume las
habladurías sobre su colaboración con el régimen de los militares argentinos,
algo que niega tajantemente, pero le parece injusto que se invalide toda su
tarea con un comentario tan aniquilador. Francisco, de un estilo mucho más
directo que ninguno de sus predecesores, también se ha expuesto a críticas más
frontales.
Para
Giovanni Vian, historiador y exdirector de L’Osservatore Romano, el
momento más difícil de su pontificado ha sido la tragedia de los abusos
sexuales de miembros del clero y de la jerarquía eclesiástica contra menores o
religiosas, según explicaba al diario colombiano El Tiempo. Ha
pedido perdón a las víctimas y ha condenado el "crimen abominable" y
ha promovido un protocolo para que no puedan seguir encubriendo casos así. Pero
los avances han sido lentos y aún queda mucho por hacer para resarcir a las
víctimas.
Es tajante
sobre el tema del aborto. "Debemos defender siempre la vida humana, de la
concepción hasta la muerte. No me cansaré de decir que el aborto es un
homicidio, un acto criminal, porque significa eliminar una vida humana que no
tiene culpas". También condena "la práctica del útero en alquiler,
que es inhumana, con los niños tratados como mercaderías".
Aunque es
el Papa más cercano al Sur Global, y a América Latina, donde vive más del 40%
de los católicos del mundo, el retroceso en favor de evangélicos y protestantes
sigue adelante. Todavía predominan los católicos, un 69% según Pew Research, pero son muchos los que a lo
largo de su vida se acercan a otras iglesias evangélicas: sobre todo en
Colombia, Paraguay, Perú y Ecuador. Es cierto que el Papa Francisco es visto
como una figura mucho más cercana que sus predecesores.
Rechaza que
la unión de homosexuales se llame matrimonio, pero no rechaza que tengan derechos
civiles como parejas. En su última biografía, señala: "El matrimonio
homosexual no es posible, pero las uniones civiles sí... Es justo que estas
personas que viven el don del amor puedan tener una cobertura legal como todos.
Jesús iba con frecuencia al encuentro de las personas que vivían en los
márgenes. Es lo que la Iglesia debería hacer hoy con las persona de la
comunidad LGBTQ que dentro de la iglesia con frecuencia son marginadas".
El segundo Papa más longevo
Desde el
domingo está celebrando los 88. Es el segundo Papa más longevo de la historia
contemporánea, solo superado por Leon XIII, que murió a los 93 años, en 1903.
El Papa Francisco, a quien le falta un lóbulo del pulmón derecho desde los 21
años, padece problemas de movilidad debido a una artrosis en la rodilla
derecha, que también tiene un ligamento roto. Como muchos a su edad, y más
por su debilidad pulmonar, es sensible a resfriados y gripes.
El domingo
realizó una visita de nueve horas a Córcega, donde se reunió con el presidente
francés, Emmanuel Macron. Con la voz cascada, habló brevemente con los
periodistas que viajaron con él. Los reporteros, encabezados por la decana
Valentina Alazraki, de Televisa, le obsequiaron con una carta con los colores
del Vaticano y un muñeco a su imagen y semejanza. Francisco recibió la torta,
como dicen los argentinos, con simpatía.
Cuando se
cumplieron diez años de su Pontificado, en 2023, el Papa Francisco hizo unas
declaraciones que le definen: "Hice lo que el Espíritu Santo me iba
diciendo que tenía que hacer. Y cuando no lo hice, me equivoqué".
Texto tomado de El Independiente /
España.