Cada vez es más habitual en España
ver en calles, caminos de tierra y hasta en competiciones oficiales todo tipo
de bicicletas eléctricas. Están arrasando en ventas frente a sus 'hermanas'
convencionales, gracias a multitud de avances tecnológicos que prometen
más potencia, autonomía y control, como un potente motor tan pequeño
como una lata de cerveza. Eso sí, muchos usuarios se lo plantean dos veces por
culpa de los elevados precios, superiores a los 2.000 euros en muchos casos, y
por la falta de stock. Además, ¿por qué renunciar a sus bicicletas de toda la
vida si hay una manera de actualizarlas?
Por eso han surgido en los últimos años multitud de kits de conversión, que permiten 'electrificar' las bicis normales, pero a veces no son fáciles de montar, suelen tener una autonomía muy ajustada y a menudo requieren sustituir elementos enteros como las ruedas. La compañía Livall fue una de las pioneras con PikaBoost, un gadget diseñado para transformar cualquier bicicleta en eléctrica en unos segundos, y acaba de anunciar su segunda generación a través de una campaña de crowdfunding en Indigogo. Su nuevo producto promete más potencia, menos peso, más alcance y un precio muy ajustado (250 euros en su versión básica), además de algunas otras mejoras decisivas.
Una de las principales ventajas
del PikaBoost 2 es su versatilidad, ya que es compatible con prácticamente
todos los neumáticos del mercado, entre las 14 y las 29 pulgadas, lo que
permite usarlo con bicicletas de montaña, de carretera e híbridas. Su
instalación es muy sencilla: se acopla a la tija del sillín y su rueda
giratoria se coloca sobre el neumático, impulsándolo gracias a su potente motor
eléctrico.
Segunda generación
Livall no es un recién llegado al
sector. En su haber también cuenta con cascos
inteligentes para bicicleta y motos. Este último, llamado MC1, procede de
la división europea de la compañía y ha sido desarrollado en Tres Cantos. En
cambio, PikaBoost 2 corresponde a la matriz estadounidense, que
pretende repetir el éxito del primer dispositivo.
Con un diseño renovado por
completo, el nuevo PikaBoost tiene un tamaño un 27% inferior (43,6 x 13,1
x 8,9 cm) con respecto a su predecesor, mientras que el peso también se ha
reducido en un 14,8% (3 kg en total, batería incluida). La clave es la rueda
en forma de V, que favorece una gran transferencia de potencia. Gracias a
su dibujo, la banda de rodadura con surcos de drenaje reduce considerablemente
el riesgo de deslizamiento en condiciones húmedas.
PikaBoost 2 de Livall
El kit cuenta con un motor Serie
500 de última generación, con potencia de 500 W, bobinados de cobre puro al
99,99% y un núcleo magnético patentado por la compañía. Eso le permite
alcanzar una eficiencia de conversión del 88%, todo un logro para
un dispositivo de tamaño tan reducido. Puede hasta con las cuestas más
empinadas y permite velocidades de hasta 32 km/h.
Gran autonomía
La batería de iones de litio de
alta capacidad de 158 Wh (y otra superior de 220 Wh) es intercambiable y ofrece
una autonomía de hasta 70 km o 96 km, dependiendo del modelo y del nivel de
asistencia utilizado. Para su carga completa hacen falta unas 3 horas enchufado
a la corriente y es una batería diseñada para durar, ya que mantiene el
80% de su capacidad original tras completar mil ciclos de recarga.
La batería también puede
hacer las veces de banco de energía portátil, gracias a sus 65 W de
potencia de entrada y 100 W de salida. Así, puede utilizarse para recargar el
portátil, el móvil o cualquier otro dispositivo dónde y cuándo quieras.
Con información tomada de El
Español.