Por Orlando Arciniegas*
El curioso pero simpático nacimiento del personaje conocido
como Popeye reúne las condiciones mágicas del acto creador. En primer término,
un creador, en este caso un dibujante y narrador de historias, Elzie Crisler
Segar (1894-1938), dentro del género del _comic_, dibujos con una narrativa
original ―que combinan arte y literatura―, y que debe al suizo Rodolphe Töpffer
(1799-1840) su más claro y preclaro precedente en el siglo XIX; aunque por su
gradualidad no falta quien haya señalado sus más lejanos orígenes en la pintura
rupestre y los jeroglíficos egipcios.
*_Popeye el Marino_*, nuestro personaje, obra de EC Segar, el seudónimo de su creador, apareció por primera vez en 1929 en la tira cómica _Thimble Theatre_ del King Features Syndicate, Inc. (empresa productora y distribuidora de contenidos intelectuales a periódicos del mundo) en la edición del _New York Evening Journal_ del 17 de enero de 1929, como un personaje secundario. Segar, nacido y criado en Chester, Illinois, un pequeño pueblo sito en un acantilado del río Mississippi, conocía ampliamente a sus vecinos. Como hijo de un manitas, había ayudado a su padre a pintar casas y pegar papel. Con grandes habilidades, tocaba la batería y brindaba acompañamiento musical a películas y actos de vodevil en el teatro local.
A los 18 años decidió convertirse en dibujante, para lo cual
tomó un curso por correspondencia de dibujos animados de W.L. Evans de
Cleveland, Ohio, en el que invirtió 20 dólares. Convencido de su talento se
mudó a Chicago donde conoció a Richard Felton Outcault (1863-1928), gran
dibujante de cómics y creador de atrapantes personajes como The Yellow Kid y
Buster Brown, quien lo animó y presentó al _Chicago Herald_. El 12 de marzo de
1916, el Herald publicó el primer cómic de Segar. En 1918, se mudó al _Chicago
Evening American_ de William Randolph Hearst, poderoso personaje empresarial y
político. Estas relaciones llevarían a Segar a Nueva York donde tendría mucho
éxito. Trabajó entonces por varios años dibujando para la empresa de autores
King Features Syndicate, también propiedad de Hearst.
En enero de 1929, cuando uno de sus personajes, Castor Oyl
(aceite de ricino), en la tira cómica Thimble Theatre del New York Evening
Journal de Hearst (publicado entre 1895 y 1937) necesitaba un marinero para
navegar su barco introdujo un viejo salado (divertido) de los muelles llamado
Popeye. Este personaje "se robó el espectáculo" y se convirtió pronto
en una destacada figura permanente. Algunos de los otros personajes notables
que creó Segar incluyen a J. Wellington Wimpy y Eugene the Jeep.
Para darle vida a Pop-eye (ojo saltón), Segar se inspiró en
un personaje real que habitaba en Chester, como se dijo, su pueblo de origen.
Se trataba de un marinero polaco llamado Frank Fiegel (1868-1947), apodado
“Rocky”, que había sido su vecino de barrio. Los Fiegel llegaron a Estados
Unidos cuando Frank era un niño. Crecido, se desempeñó por largo tiempo como
marino. Cuando el creador de Popeye lo conoció, ya había dejado su oficio, y
trabajaba para una ruidosa taberna de frecuentes grescas. Fiegel se ocupaba de
la limpieza y de tratar de poner orden. Allí tenía fama de ser de temperamento
explosivo y temerario, trabado siempre en peleas en las que debía haber perdido
muchos de sus dientes. Siempre mantenía una severa expresión de su rostro y
cerrado uno de sus ojos (tuerto). A lo que se debía el sobrenombre de “ojo
saltón” (“Pop-eye”).
Se solía decir que cuando estaba airado desarrollaba una gran
fuerza, que lo convertía en ganador de casi todas sus peleas, si bien era de
estatura más baja que la de muchos de sus oponentes. Sin embargo, Popeye, en
sus incalculables e imaginarias aventuras, a cuál más rocambolesca, aseguraba
siempre ante su animado público de gente menuda no haber perdido ni una sola de
sus camorras. Cada vez insistía en decir que todo su poderío le venía de las
espinacas que comía asiduamente.
Elzie Crisles Segar fue uno de los niños que en su nativo
Chester tuvo el privilegio de escuchar “en vivo y en directo” las espléndidas
historias del antiguo marinero. De él guardo para siempre la imagen que le
estampó a Popeye mientras fumaba con su pipa, y hablaba solo por una parte de
su boca. A Fiegel se le menciona como inspiración del personaje de Popeye en la
placa conmemorativa del pedestal sobre el cual se erige la estatua del
personaje y su creador E.C. Segar en el Memorial Park de Chester, a pocos
metros de distancia del río Mississippi. Y se piensa que, en algún momento,
Fiegel debió tener una fisonomía parecida con la atribuida al personaje del
cómic. Aunque hay quien disiente.
*Historiador. Profesor
titular (J) de la Universidad de Carabobo