Túnez. (SANA). Alrededor de 900 migrantes que
intentaban llegar ilegalmente a Europa murieron ahogados en las costas de Túnez
durante los primeros siete meses del año, según las autoridades del país.
En este sentido, el ministerio del Interior indicó este
jueves a AFP que del 1 de enero hasta el 20 de julio se recuperaron en el mar
los cuerpos de 901 migrantes, de los cuales 26 eran tunecinos, 267
“extranjeros” (africanos) y 608 no pudieron ser identificados.
El Mediterráneo central -entre África del Norte e Italia- es la ruta migratoria más peligrosa del mundo en 2023, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que ha registrado más de 20.000 muertes desde 2014.
Cabe señalar que algunas zonas costeras de Túnez se extienden
a menos de 150 kilómetros de la isla italiana de Lampedusa. Por lo que se
registra periódicamente la salida de inmigrantes, principalmente de África
subsahariana.