Tras el tiroteo
del martes en la ciudad de Uvalde en Texas, el presidente Joe Biden
se preguntó “¿Cuándo, en nombre de Dios, nos enfrentaremos al lobby de las
armas? ¿Cuándo haremos lo que se debe hacer?”.
Biden dio un discurso donde ponía el foco sobre el grupo de
presión o lo que es prácticamente lo mismo: sobre la Asociación Nacional del
Rifle (NRA), reportó El Español.
Pero ¿cómo una organización es capaz de bloquear el control
de armas en EEUU? ¿Por qué nadie ha conseguido doblegarla en sus más de 150
años de historia?
Influencia política sobre armas en EEUU
El poder de la NRA viene de muchos frentes. El principal es
que tiene a medio Congreso metido en el bolsillo gracias a las generosas
donaciones a campañas políticas.
Según Open Secrets, una organización que traza el flujo de
dinero en Estados Unidos, sólo en 2016 donó cerca de 50 millones de
dólares a campañas y candidatos de las elecciones presidenciales.
Además, de acuerdo con la plataforma Fact Check, la entidad
invirtió 22 millones de dólares en anuncios televisivos que pedían la victoria
o la derrota de políticos específicos.
Entre los afortunados se encontraba el expresidente Donald
Trump, a quien la entidad apoyó con 1,9 millones. También gastó 7,5 millones en
atacar a la candidata demócrata, Hillary Clinton.
¿Qué defiende?
El Partido Republicano y la organización comparten la férrea
defensa de la segunda enmienda a la Constitución de EEUU que garantiza el
derecho de los ciudadanos “a poseer y portar armas”.
Ese es también el máximo objetivo de la Asociación Nacional
del Rifle, que realiza cursos de entrenamiento de tiro y organiza eventos de
ventas de armamento por todo el país.
Fundada en 1871 por dos veteranos de la Guerra Civil de
Estados Unidos, la asociación se sustenta en una lógica sencilla: si se
enseña a la gente a usar las armas “de forma eficaz y segura” se contribuye a
construir un país más seguro. O, en palabras de su vicepresidente, Wayne LaPierre,
“lo único capaz de detener a un tipo malo con un arma es un tipo bueno con un
arma”.
Las armas: un negocio lucrativo
Datos del IBISWorld señalan que los ingresos de la industria
de la fabricación de armas y municiones está actualmente valorada en 19.500
millones de dólares. Y los ingresos van in crescendo: en lo que llevamos de año
han aumentado un 1,6% gracias al aumento de las compras.
Sin ir más lejos, el año pasado 5,4 millones de
norteamericanos compraron un arma por primera vez, según datos de la National Shooting
Sports Foundation.
Una buena noticia para los cinco millones de afiliados que la
NRA dice tener, aunque podrían ser muchos más. Hay estudios que sostienen que
la cifra real podría alcanzar los 19 millones de personas.
Se sabe también que ocho de cada diez seguidores votan a los
conservadores. Un perfil bien definido que también tiene influye en el enorme
poder que tiene la organización en Estados Unidos.
Tomado de El Político / España.