Por Salem Laaraj
Argel (ECS).-Las
manecillas del reloj marcaba el mediodía y en el horizonte se divisaba una
modesta flotilla de vehículos que a bordo de los cuales iba la esperanza de
todo un pueblo (...). El presidente ha vuelto* sano y salvo, camina vigoroso con
pasos firmes, y con buen semblante.
Como exige la envergadura del momento le esperaba, una unidad de élite
del heroico Ejército Saharaui (ELPS) para darle el saludo de honor, y para
amenizar la ocasión se entremezclaban los ululeos (Azgaritt) y los vítores de
los ahí presentes con las sonatas de la banda musical castrense haciendo una
sinfonía rítmica que deleita el sentido vestibulococlear.
El presidente estaba rebosante de regocijo, porque se encontraba entre los suyos (su pueblo), y ha vuelto a vestir el uniforme verde olivo. Atrás quedaron las campañas difamatorias del Majzén, y muy lejos quedaron todas las puestas en escena circenses del régimen Alauí, y todas sus mentiras se han disuelto como un azucarillo.
Ghali es la historia viviente de la justa lucha del pueblo saharaui; el
hombre es cabal, íntegro, y consecuente (cumple lo que dice). Formó parte del
primer núcleo embrionario del Frente Polisario (siendo su primer Secretario
General). El actual presidente saharaui dirigió con éxito todas las batallas de
la primera etapa de la lucha armada del pueblo saharaui (fungiendo como
ministro de defensa, y estratega militar). El hombre es sencillo, honesto,
valiente, intrépido e incorruptible.
En su hoja de servicios al pueblo saharaui podemos encontrar muchas
gestas heroicas militares, y diplomáticas:- Lideró el ataque al puesto de El
JANGA (Contra el colonialismo español). Es compañero de armas de Sidi Brahim
Bassiri, y de Luali Mustafa Sayed.
Le plantó cara a la ocupación española (Federico Gómez de Salazar). Allá
por los años 70 impulsó y encabezó las primeras manifestaciones saharauis
contra la ocupación (Intifada de Zemla). Es diplomático autodidacta y
convencido de la victoria de su pueblo.
*Nota de la redacción de ETD. Brahim Ghali estuvo cerca de 6 meses hospitalizado por Covid-19 en España y Argelia.