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10 abril, 2020

El portaaviones francés ‘Charles de Gaulle’ acorta su misión por la Covid-19


La posible infección de unos cuarenta marineros obliga al navío a regresar anticipadamente a su base en Toulon

EUSEBIO VAL / Tomado de La Vanguardia – España. Foto: SEBASTIAN NOGIER / EFE

El portaaviones Charles de Gaulle, buque insignia de la Armada francesa y símbolo del poderío militar del país, ha interrumpido su actual misión en el Atlántico debido a la sospecha de infección de la Covid-19 de unos cuarenta miembros de su tripulación. El barco regresará a su base de Toulon, en la costa mediterránea, antes de la fecha prevista, según ha informado el ministerio de Defensa.
El Charles de Gaulle, de propulsión nuclear, participaba en la misión Foch, junto a otros países aliados. Anteriormente estaba desplegado en la operación Chammal, de apoyo a la lucha antiyihadista en Siria e Irak. Los marineros que presentan síntomas compatibles con la Covid-19 son objeto de un seguimiento médico especial y se hallan aislados como precaución.

La tripulación del navío de guerra es de unas 1.800 personas. Transporta unos cuarenta cazabombarderos Rafale y varios helicópteros. El buque dispone de un pequeño hospital, con quirófano, así como respiradores y un área de confinamiento con un centenar de plazas. En caso de tener que efectuar una evacuación de urgencia, el enfermo sería llevado ahora, en helicóptero, a un aeropuerto en Portugal o España, y de ahí repatriado a Francia.
El retorno anticipado del único portaaviones francés coincide con el consenso cada vez mayor a favor de alargar el confinamiento. El presidente del consejo científico asesor, Jean-François Delfraissy, ha insistido hoy en que es “capital” mantener las condiciones de aislamiento de la población al menos durante unas semanas –sin especificar cuántas- porque el pico de la pandemia aún no se ha alcanzado y es por tanto resulta imprescindible evitar que crezcan los contagios para no colapsar aún más los hospitales. La cierta relajación del confinamiento debido al buen tiempo ha creado alarma y ha obligado a tomar medidas puntuales en algunas ciudades, como París, que ha restringido el horario para hacer jogging.