Un nuevo estudio multicéntrico de las universidad de
Columbia, Washington y Buffalo (Estados Unidos) vincula la exposición a largo
plazo a la contaminación del aire, especialmente el ozono, con el desarrollo
de enfisema y la disminución de la función pulmonar relacionada con la
edad, incluso entre personas que nunca han fumado, según un estudio publicado
en el 'Journal of the American Medical Association' (JAMA).
Los hallazgos pueden ayudar a explicar por qué el enfisema es
relativamente común en los no fumadores. La enfermedad crónica de las vías
respiratorias inferiores, un término general para enfisema, enfermedad pulmonar
obstructiva crónica (EPOC), bronquitis crónica y asma, es la tercera causa de
muerte en todo el mundo.
El estudio, el más grande y más largo de su tipo, analizó si
las exposiciones a cuatro contaminantes principales (ozono a nivel del suelo,
partículas finas (PM), óxido de nitrógeno y carbono negro) se asociaron con el
desarrollo de enfisema, medido mediante tomografía computarizada y disminución
de la función pulmonar, medida por espirometría.
El ozono a nivel del suelo daña la salud humana,pero
el ozono en la atmósfera protege contra los dañinos rayos ultravioleta del sol.
El estudio incluyó a más de 7.000 adultos de 45 a 84 años que
viven en Chicago, Los Ángeles, Baltimore, St. Paul, Nueva York y Winston-Salem
y que participaron en el Estudio Multiétnico de la Contaminación del Aire por
Aterosclerosis ( MESA Air) y MESA Lung estudios. Los participantes fueron
seguidos durante una media de 10 años. Los niveles de contaminantes del aire se
estimaron en la dirección de casa de cada participante.
La exposición a corto plazo a los contaminantes del aire es
un factor de riesgo importante para la mala salud pulmonar.
Los investigadores descubrieron que la exposición a cada uno
de los contaminantes al comienzo del estudio estaba relacionada de forma
independiente con el desarrollo de enfisema durante el período de estudio. La
asociación más fuerte se observó con el ozono. Solo el ozono, al inicio y
durante el seguimiento, se asoció con una disminución de la función
pulmonar.
Las concentraciones ambientales de partículas finas y óxido
nitroso, pero no de ozono, disminuyeron significativamente durante el período
de estudio.
"El aumento en el enfisema que observamos fue relativamente
grande, similar al daño pulmonar causado por 29 años de fumar y 3 años de
envejecimiento", señala R. Graham Barr, profesor de Medicina y
Epidemiología de Hamilton Southworth en Centro Médico Irving de la Universidad
de Columbia y autor principal del artículo.
De hecho, los investigadores descubrieron que si el nivel de
ozono ambiental era 3 partes por mil millones más alto en un lugar en
comparación con otra ubicación durante 10 años, eso se asocia con un aumento en
el enfisema, aproximadamente el equivalente a fumar un paquete de cigarrillos
al día durante 29 años.
"Estos hallazgos son importantes ya que los
niveles de ozono a nivel del suelo están aumentando, y la cantidad de
enfisema en las tomografías computarizadas predice la hospitalización y las
muertes por enfermedad crónica de las vías respiratorias inferiores",
añade Barr.
"El ozono a nivel del suelo se produce cuando la luz
ultravioleta reacciona con los contaminantes de los combustibles fósiles
--agrega--. Este proceso es acelerado por las olas de calor, por lo que el
ozono a nivel del suelo probablemente continuará aumentando a menos que se
tomen medidas adicionales para reducir las emisiones de combustibles
fósiles y frenar el cambio climático. Pero no está claro qué nivel de
ozono, si lo hay, es seguro para la salud humana". Fuente: Econticias.com