70 niños serán beneficiados por este nuevo comedor instalado en una escuela de Fe y Alegría de la Zona 10 de José Félix Ribas. Con este espacio el programa podrá atender a 730 niños y a 70 madres en período lactante, a quienes les ofrecerán almuerzos de lunes a viernes
Se trata del octavo comedor instalado por el grupo, cifra gracias a la cual atienden a 730 niños y 70 mamás en período lactante. Los centros están ubicados en zonas como San Isidro, San Blas, Barrio Unión y La Agricultura, barrios con altos índices de personas de bajos recursos y donde el almuerzo diario para los niños resulta un apoyo fundamental.
En la actividad participaron Ángel Alvarado y Andrés Schloeter, concejales del municipio Sucre e impulsores de esta iniciativa. “Este es el momento de la solidaridad y de extender la mano para salir adelante. En este país estamos cansados de las palabras, por eso es necesario fomentar acciones como esta”, dijo Alvarado.
Por su parte, Schloeter recordó que cada almuerzo otorgado en estos comedores cuesta más que un salario mínimo y que, en este caso, el espacio habilitado en José Félix Ribas se consolidó gracias al respaldo de una fundación de Suiza que aportó los recursos necesarios.
En estos entornos son las propias madres de los niños beneficiados las que preparan los alimentos con la asesoría de los encargados del programa. Míriam Bravo, una de las mamás beneficiadas del comedor de San Isidro, contó su experiencia a las nuevas colaboradoras y aseguró que “servir un plato de comida a tantos niños es genial, te llena. Yo tengo siete hijos y me siento madre de los 120 que comen allí. Estas cosas te llenan el espíritu porque mientras crezca la solidaridad, nos hará conocernos más como venezolanos”.