Tan solo 10 días separan a los pacientes renales de sus tratamientos de diálisis en los estados Aragua, Bolívar, Portuguesa y Miranda, pues de acuerdo a un articulo reseñado por el Nacional Web, el material para terapia de sustitución renal, solo alcanza para los días mencionados debido al alto costo y la imposibilidad para importar.
La crisis renal contrario a resolverse se agudiza en grandes proporciones, pues de 129 centros que ofrecen el servicio a nivel nacional, hoy 13 centros piden a familiares de pacientes buscar cupos a los pacientes en otros lugares porque no pueden mantener los costos operativos.
Por su parte fuentes allegadas al Ministerio de Salud informan públicamente que el abastecimiento de dializadores se está agotando, pues lo que importó el gobierno no fue suficiente para cubrir el mes de atención a pacientes renales, el material que queda en las unidades de diálisis alcanza máximo para 10 días.
Dueños de esas unidades de diálisis informaron que hace 15 días se reunieron en Caracas con el IVSS y les prometieron ajustar las tarifas. Indicaron que desde septiembre de 2017 el instituto gubernamental paga 37.000 bolívares por la terapia de cada paciente, cuando un bombillo cuesta 140.000 bolívares. Solo el mantenimiento de la plata de tratamiento que purifica el agua usada en la diálisis tiene un costo de 42 millones de bolívares, y debe hacerse por lo menos cada 6 meses para evitar contaminación.
Fuente: El Nacional.