Caracas.- La Secretaria General de Un Nuevo Tiempo en Miranda y concejal del Municipio Sucre, Rosiris Toro, alertó que la inflación mantiene sumergido en miseria, hambre y desesperación a los venezolanos, mientras desde el Ejecutivo se mantiene la postura de atentados contra el gobierno. De la misma manera resaltó que un ciudadano no puede vivir con Bs. 3.251 diario, "el reflejo se ve en las calles".
La también presidenta de la Comisión de Abastecimiento, Mercadeo,
Integración Comunal y Emprendimiento, indicó que "el salario mínimo no alcanza para
cubrir ni la cuarta parte de la canasta básica, cuando se consigue, es inaudito
que a estas alturas el gobierno mantenga el descaro de insistir en que se debe
a un saboteo contra su gestión, sí hay una guerra económica propiciada desde
las filas del propio Psuv, ya que son los que han estado a la cabeza de instituciones
que han manejado recursos para la producción, abastecimiento y exportación de
alimentos, por ejemplo".
En ese sentido, descalificó la actuación que ha tenido la
"fraudulenta" Asamblea Nacional Constituyente, a su juicio,
"Nicolás Maduro y su cúpula nunca pudieron aceptar que la mayoría del
pueblo venezolano no los apoyo en las elecciones de la Asamblea Nacional, es
por eso que impulsaron decenas de sentencias contra el Parlamento, avalado por
un Tribunal Supremo de Justicia viciado y netamente partidista, pero como si
eso no fuera suficiente y de manera irregular instalaron una ANC que su
propósito es sólo político, acabar con la disidencia y convertir lo irregular
en legal por medio de decretos".
La abanderada por la tolda azul insistió en que el rostro de la miseria
humana "ha sido bien representado por Delcy Rodríguez, quien se niega a
reconocer la crisis humanitaria a la que nos enfrentamos, está claro en que su
prioridad nunca ha sido combatir el hambre, hecho que además no se logra por
decretos ni discursos".
La edil Rosiris Toro consideró que es necesario que se tomen cartas en el
asunto lo antes posible, "se debe hablar claro al país, reconocer y dar a
conocer las cifras de inflación, diseñar planes que ayuden a frenar la
desnutrición de la que están muriendo nuestros niños frente a la indolencia de
los autodenominados humanistas, pero que en la práctica son otra cosa".