EFE – Madrid /
Tomado de eldiario.es
El presidente electo de Angola, João
Lourenço, quien sucederá a José Eduardo Dos Santos tras 38 años en el poder,
afirmó en una entrevista con Efe que abrirá el país a la inversión extranjera,
privatizará empresas y consolidará la ruta hacia el libre mercado.
"¿Reformador? vamos a trabajar
para ello, pero desde luego Gorbachov no, Deng Xiaoping sí", respondió
Lourenço cuando se le pregunta si busca ser el Mijail Gorbachov angoleño,
durante la visita privada que realiza en Madrid tras ganar el 23 de agosto las
elecciones en su país.
El hasta ahora ministro de Defensa
espera culminar la transición al capitalismo en esta nación africana que obtuvo
su independencia en 1975 como un estado marxista leninista y que vivió una
guerra civil de 27 años, hasta 2002.
"Asumo el reto con mucha
confianza a pesar de las dificultades", dijo, al reconocer que "la
situación financiera es menos buena a causa de la caída de los precios del
petróleo".
La fortaleza de Angola es la paz de
2002, que ha permitido celebrar tres elecciones pacíficas desde esa fecha y
obtener un crecimiento sin precedentes, aunque con las lacras de la pobreza y
la corrupción.
El objetivo de Lourenço es "el
desarrollo económico y social" y para ello invita a los inversores
extranjeros a participar de las oportunidades: "vamos a trabajar para
crear buen ambiente de negocios y vamos a modificar nuestra política de visados
porque hasta ahora ha sido un impedimento", adelantó.
Las claves serán la diversificación
y las privatizaciones.
"Nuestro país, Angola, puede
sobrevivir, tiene recursos más allá del petróleo", dijo al enumerar los
cuatro sectores que requerirán inversiones: agroindustria, minería, pesca y
turismo.
"Angola tiene una gran
extensión, muchas tierras cultivables, mucha agua, un clima muy propicio porque
no tiene invierno, y puede ser una gran potencia agrícola, del tipo de
Brasil", destacó.
Y cuenta con "gran cantidad de
minerales, como diamantes, oro, hierro"; y "en otros tiempos fue un
gran productor de pescado y mariscos", reveló. Ese gran litoral -continuó-
permitirá también el desarrollo del sector turístico.
Para todo ello hay que construir
infraestructuras, y ahí es donde Lourenço hace un llamamiento a los inversores.
La privatización "es una
posibilidad que está abierta. ¿Cuáles empresas? No le puedo decir, eso lo vamos
a estudiar caso por caso, y lo hará el nuevo Ejecutivo", respondió al ser
preguntado por esa posibilidad.
"Vamos a estudiar la posible
privatización de aquellas empresas estatales que son pesos muertos para el
país, que no son rentables, que le están costando mucho dinero a las arcas del
Estado", matizó.
En este contexto, reconoció que la
pobreza sigue siendo un problema acuciante: "Durante los últimos 15 años
hemos ido reduciendo el índice de pobreza, aunque reconocemos que sigue
existiendo".
Prometió tomar medidas a favor de la
inclusión económica y social: "El Estado no puede ocuparse de todos los
ciudadanos. Por eso apostamos al sector privado, es la solución al problema del
desempleo", argumentó.
En cuanto a la corrupción, dijo:
"somos conscientes de que existe, en el MPLA (Movimiento para la
Liberación de Angola -partido de Lourenço) lo reconocemos, sabemos que es de
los mayores males que sufre nuestra sociedad".
"Lo que buscamos, sabemos que
va a ser difícil, es llegar a niveles no vamos a decir aceptables, pero que
existen a nivel internacional. Y estamos decididos a luchar esa batalla",
indicó.
Lourenço recibe un Gobierno
construido durante 38 años por Dos Santos, quien se retira del poder pero no de
la presidencia del MPLA.
"La independencia se ha
mantenido; la soberanía, también; se han evitado dos invasiones, una por el
norte y otra por el sur; se ha acabado con el 'apartheid', ayudando a Namibia y
Sudáfrica; y con el conflicto interno de Angola", dijo el presidente
electo al destacar los logros de su antecesor.
Lourenço reconoció que es inevitable
que Dos Santos se inmiscuya en el Gobierno.
"Está claro que el MPLA va a
influir en las políticas del gobierno porque es el partido más votado, tiene el
61 % de los votos. No es justo pensar que el MPLA no va a conducir las
políticas del nuevo gobierno, entonces ¿quién sería? ¿el partido menos votado?.
Sin duda el nuevo gobierno va a seguir el ideario del MPLA", remarcó.
Pero tiene claro que su misión es
distinta a la de su antecesor: "consolidar las bases de la economía de
mercado".
"El paso del marxismo leninismo
hacia una democracia multipartidista o economía de mercado comenzó en
1991", aseveró Lourenço, al reafirmar: "Es un proceso que no se hace
de la noche a la mañana, nosotros vamos a consolidarlo y vamos respetar las
bases de la economía de mercado".