Canarias Ahora
En febrero tuvo lugar en un teatro de Berlin el acto fundacional del Movimiento para la democracia en Europa – 2025 (@DiEM25) que impulsa el exministro de Finanzas griego Yanis Varoufakis.
Desde que el contagio de la Gran Recesión entró de
lleno a Europa en 2010, Grecia no sólo ha tenido en vilo a los mercados y al
mismísimo proyecto europeo, sino que también ha influenciado en los países por
separado.
En medio de una Europa convulsa y cuando los gases
lacrimógenos vuelve a la escena una de las figuras más reconocibles y controvertidas de la
actualidad del continente, Yanis Varoufakis, reaparece con una iniciativa que,
ni más ni menos, pretende plantar cara nuevamente a las autoridades
europeas.
Varoufakis admite que intentar impulsar el cambio
desde un esfuerzo ciudadano y a nivel paneuropeo para lograr mayor
transparencia, democracia y justicia social, y el asumir los problemas no como
griegos, alemanes o españoles, sino como europeos, puede resultar utópico. Sin
embargo, y en opinión de quien renunció al cargo por lo que entendió que
fue la rendición de su Gobierno a
los dictados de la troika por
encima del mandato democrático de un pueblo, fracasar en la regeneración de la
Unión Europea no es una opción. Para el exministro, de no poner arresto a la
fragmentación que la UE actualmente sufre a causa de sus diversas crisis y que
la están llevando a toda prisa por derroteros fundados en la xenofobia y el
extremismo, el fin de la UE será inexorable y peligroso. Así, Varoufakis
entiende que el único antídoto es que un movimiento democratizador ponga fin al
dictado de la burocracia elitista que actualmente domina las instituciones europeas.
Veremos a que conduce esta iniciativa.