por JESÚS FRANCISCO GÓMEZ
¡La vaina está jodía y se lo llevó quien lo trajo!
Dicen unos. ¡Lo que está pasando está en las Santas Escrituras de la Biblia, ni
Chávez ni Maduro tienen la culpa de esto! Dicen
otros y, rematan exclamando_ ¡Somos nosotros los culpables!_. ¡Como ñe! _Le replica el chofer de la
camionetica, que hasta el momento no había intervenido_.
Es una Torre de Babel el interior de la camionetica
que se ha convertido en un foro ambulante entre Tirios y Troyanos. Nadie se
entiende. La discusión es airada. La camionetica se desplaza por la avenida
principal de La Isabelica, sentido Plaza de Toros, entre frenazos y cola.
Dentro de lo dimes y diretes, una mujer señala con el dedo y exclama _ ¡Miren
esos bloques de La Espiga de Oro que en un tiempo los vecinos se preocupaban
por mantenerlos limpios y pintaditos!
Funcionaba el Aseo y Ornato, porque funcionaba el condominio y no había las
rivalidades que existen ahora. Han dejado que se deterioren tanto en pintura
como en servicios. Vean el estacionamiento inundado de aguas negras y
putrefactas por la rotura de la cañería cloacal. Ningún propietario o vecino
aporta dinero a la Junta de Condominio para que paguen los servicios de luz, cloacas, agua blanca, basura, corten el
monte y a la persona que se encarga de esos menesteres en el bloque. ¡Esto es
un desastre! Así están los demás bloques de la urbanización. Tú ves, la culpa
es de nosotros_ le cacarea otro pasajero_. No compadre, eso no es así. El
culpable fue quien nos inoculó su odio y frustración a nosotros. Dividiéndonos
en castas sociales_ le responde el chofer_.(...)
_Ahh! Y qué me dices, chófer, de las avenidas
inundadas de basura, del bulevar descuidado que tenemos. ¿Es culpa nuestra, no
joda? Ustedes eligieron a Cocciola, un alcalde opositor_ le responde un
pasajero desde la parte de atrás. _
¡Carajo, chico!, le grita el Chofer, _ Dos cosas te voy a decir. Primero,
ustedes eligieron al ladrón de Edgar Parra
que tenía todos los recursos y camiones del aseo del mundo; sin embargo,
la situación de la basura y demás servicios eran peor. Segundo, cuando ganó el
actual alcalde, el cual no es santo de mi devoción, derrotando a cien milito, el Gobernador
arrasó con todas las competencias de la alcaldía, llevándose consigo los camiones del Aseo. Por cierto, autor
intelectual de la muerte de Geraldine y de otros crímenes que algún día tendrá
que pagar.
A ti te consta esa vaina_ Le pregunta el pasajero a
la vez que se abalanza, a través del pasillo de la camioneta, contra el chofer.
Los pasajeros agitados unos y otros tratan de detener al energúmeno. El chofer
evitando la agresión no ve el cambio de luz para estrellarse contra otro
vehículo. La intolerancia nos ha llevado a esto ¡Gracias a Dios que no hubo
heridos! Pero esto es lo que hay, en esta Venezuela que nos quedó chiquita.
@chuitoelderosa