Hablan las mujeres
Siempre he creído que las luchas deben ser impulsadas por hombres y mujeres por igual. Cierto que hay situaciones que atañen más a un sector, sin embargo, las luchas se hacen más llevaderas para un grupo con el apoyo solidario de los otros. La presencia femenina en algunos casos es notoria y muchas veces determinante en el planteamiento y resolución de conflictos. En los últimos días han llamado mi atención hechos protagonizados por mujeres, con mucha significación dentro del complicado momento político y social que vivimos. Los dos casos ocurren en América Latina.
A mediados de julio las mujeres mexicanas se convocaron a lo que se denominó Encuentro de Mujeres de Izquierda ante la Emergencia Nacional. Fueron al grano: "nos convocamos a discutir la situación del país" y como razones expusieron la creciente violencia con el preocupante saldo de homicidios y barbaries, incremento de paramilitares y cacicazgos, criminalización de las luchas sociales, la corrupción y la impunidad generalizada, la descomposición social, los despidos masivos, la pérdida de derechos sociales, la depredación ambiental, el crecimiento de la pobreza y su feminización, la sistemática violación de la Constitución Nacional, así como la amenaza de aprobación de nuevas leyes retrógradas en el plano laboral y que en general son un retroceso en la vida democrática, frenan la democratización del poder. Esas razones son válidas en la mayoría de nuestros países para convocar a la movilización de toda la población en defensa de sus derechos, en defensa del hecho democrático.
En Venezuela, otro grupo de mujeres decidió encarar al presidente Hugo Chávez, ante lo que han llamado otra modalidad de la política de expropiaciones emprendida por el gobierno nacional. Dicen las mujeres que ahora comenzará la "expropiación de partidos políticos" y que eso es lo que se está gestando para que un grupo afecto a Chávez se apropie de las siglas del partido Patria Para Todos (PPT). La historia es conocida, el PPT formó parte del antiguo Polo Patriótico que apoyó a Chávez, luego rompió con el chavismo al negarse al partido único y exigir una dirección colectiva del proceso y ahora busca la conformación de un Frente Progresista con partidos políticos y movimientos sociales. Las mujeres pepetistas denuncian que desde el gobierno se financia a un grupo de militantes del partido de gobierno para crear una organización paralela que solicitará al CNE la asignación de las siglas PPT, es decir, se estaría consumando la expropiación del nombre de un partido político. Estas mujeres lanzaron el alerta, se convocaron para comunicar al país a través de los medios de comunicación la amenaza que se cierne sobre el partido en el que ellas militan voluntariamente, ejerciendo el derecho que tienen todos los venezolanos, consagrado en la Constitución Nacional. Y a través de los medios mandarle un mensaje a Hugo Chávez:"Presidente, ocúpese del país, nosotras nos ocupamos del PPT". A las mujeres hay que oírlas.
Anarquía en distribución del gas
La anarquía se apoderó de la distribución del gas doméstico. Una verdadera pesadilla viven los usuarios de este servicio para conseguir una bombona de gas. Y no es que nos estamos acostumbrando a hablar mal de las instituciones del gobierno, sino que la realidad hay que afrontarla. Antes el problema era que los distribuidores tenían dificultad para llenar las bombonas y por ello hacían esperar a los clients por varios días, pero al menos cuando se les reclamaba daban esa excusa. Luego la mayoría de esas distribuidoras fueron sustituidas por el llamado Gas Comunitario, una distribuidora oficial que los primeros días parecía muy eficiente.
Ahora los usuarios van a la oficina del gas, se anotan en una lista de espera, pasan los días, llaman por teléfono, vuelven a la oficina, hacen los reclamos, pasan los meses y nunca les llegan las bombonas, las respuestas son varias, que si se accidentaron los camiones, que si en 15 días llevan las bombonas, cualquier excusa, pero lo cierto es que la gente sigue esperando. Cuando un cliente ve en la calle al camión con bombonas y cree que va para su casa se alegra, luego se frustra, con toda razón, al presenciar como las bombonas se distribuyen al mejor postor, quien más ofrezca al repartidor se queda con la bombona. Estos casos lo denuncian usuarios de varios municipios. El servicio se anarquizó, hay irregularidades, alguien se está lucrando con un servicio público. ¡Quién pone orden en esto?
