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02 mayo, 2010

PAPELES DE COCINA


MI MEJOR RECETA DE CHIGÜIRE

Rubén Osorio Canales en su libro MEMORIAS DEL FOGON, nos presenta una de las mas completas recetas de chigüire que hayamos conseguido .Roedor de gran tamaño , la carne de este animal de los llanos venezolanos forma parte de uno de los platos mas tradicionales de la semana santa de nuestro país . A continuación le describimos la receta de este chigüire:

“Ese gran venezolano que ha sido Reinaldo Espinoza Hernández , creador de Fantasías Dominicales , uno de los grandes animadores culturales de este país, inventor de la fiesta que usted le diga, amigo y poeta muy querido …..Varios amigos solíamos acompañarlo a esa suerte de fiestas patronales modernas y recuerdo que una semana nos fuimos a un velorio de cruz organizado por Don Anselmo López nuestro gran mago de la bandola. Fiesta sabrosa e inolvidable que concluyo con un chigüire que había preparado con anterioridad de la siguiente manera:

Puse a desalar un kilo de chigüire cambiando varias veces el agua .Al día siguiente lo desmeche después de sancocharlo en un caldo hecho con cebollas, ajo porro , ajos , clavos de especia , laurel , zanahoria , huesos de pollo , y huesos de res. Luego en un caldero puse dos buenas cebollas picaditas , unos seis dientes de ajo picaditos y los deje marchitar a fuego suave , añadí un pimentón picadito y ya montado ese sofrito , añadí la carne mechada del chigüire , revolví bien y algunos minutos después , agregue tres ajíes dulces picaditos , la pulpa de ocho tomates , unas quince alcaparras picaditas y quince aceitunas verdes rellenas con pimentón también picaditas , removí bien y comencé a bañar , poco a poco y a fuego lento , la carne de aquel extraño roedor que por lo feo , no dice lo sabroso que es , con el caldo de vegetales sobrante. Cuando logro la textura propia y su sabor había abandonado el paroxismo del almizcle y descendió a dimensiones mas gustativas y deleitosas , lo servimos y lo comimos con una absoluta devoción llanera , acompañado de un arroz blanco y unos plátanos maduros hechos al horno y rellenos con queso blanco rallado.