Giuseppe Pipitone
Manuel Henríquez, conocido como el “Comandante Tobe”, de madre esequibana y de padre venezolano, relata la cruda realidad que vive la Guyana Esequiba, un territorio rico, pero plagado de personas y empresas que buscan el beneficio personal a costa de la destrucción de la flora y la fauna que allí impera, incluso, los asentamientos indígenas que existen en la zona.
“El gobierno guyanés está dando concesiones a las empresas madereras y eso va en contra de nuestros preceptos. Hay contrabando ilícito de combustible, tala ilegal de bosques y extracción de oro y diamante. La mayoría de las veces esto ocurre en conchupancia con las autoridades venezolanas... todos esos sectores los están depredando. También quieren acabar con nosotros porque representamos una amenaza para el gobierno guyanés y para los garimpeiros, porque defendemos la selva y estamos estratégicamente ubicados”, dijo Henríquez.
Explicó que la explotación del oro en territorio esequibano es algo que forma parte del día a día y ya se están viendo los efectos. “Muchos niños ya han perdido el cabello y los dientes, producto del efecto nocivo del mercurio, pues el agua está contaminada con ese químico y es justo esa agua la que nos está matando”.
Este hombre de rasgos indígenas, que habla perfectamente la legua castellana, asegura que depende de un consejo de ancianos conformado por 250 chamanes, provenientes de las distintas comunidades indígenas que hacen vida en ese territorio. “Estoy aquí en Venezuela para pedir ayuda, porque queremos vivir en paz. Producimos arroz y no queremos comercializarlo con el gobierno de Guyana, ni con los brasileros... los esequibanos nos sentimos venezolanos y queremos que se nos reconozca como tal”. No obstante, asegura que desde los ojos de los guyaneses, son considerados “apartidas” y, desde la óptica venezolana como “indios esequibanos”, por lo que han recibido discriminación de parte y parte. “Mi pregunta es... si este es un territorio que Venezuela está reclamando, ¿por qué nos tratan como extraños?”
La avanzada venezolana
Hace ya unos años, se fundó en plena frontera con la Guyana Esequiba, un pequeño pueblo llamado Puerto Esquivel. La idea provino del coronel Pompeyo Torrealba, que con un grupo de personas de la zona, desmalezaron el sector y colocaron un busto de Simón Bolívar y levantaron un pequeño campamento con tiendas de campaña. Tanto los brasileros (garimpeiros) y el gobierno guyanés, estaban interesados en acabar con el pequeño asentamiento. Las condiciones climáticas y el difícil acceso, han hecho que Puerto Esquivel hoy esté despoblado. Parte de la responsabilidad de lo ocurrido, se le atribuye al desinterés del gobierno venezolano. Para Henríquez, el hecho de que estas tierras permanezcan sin habitantes luego de su fundación, es porque la vida de quien permanezca allí “corre un verdadero riesgo, porque hay muchos intereses económicos de por medio”.
Los esequibanos quieren cédula venezolana
“Los que vivimos aquí (en el esequibo) vemos como un sueño obtener la nacionalidad venezolana, que se nos reconozca como venezolanos. Una vez, un compañero de la tribu obtuvo la nacionalidad porque le correspondía por derecho, porque su padre era de Venezuela... pero cuando él vino con la copia de los documentos donde se decía que ya era venezolano, se los rompí en la cara, porque considero un insulto que se nacionalice a alguien que nació en tierras venezolanas”, aseguró Henríquez. Al tiempo que hizo un llamado al gobierno de nuestro país a no permanecer de manos cruzadas ante lo que está ocurriendo en el Esequibo. “A nosotros no nos quedó más alternativa que armarnos. Contamos con más de 3.200 personas en armas, pero no para matar, sino para defendernos. El gobierno guyanés nos ve como un estorbo... como gente indeseable. Lo que cosechamos nos lo decomisan. Nos han hecho la guerra”.
Expresó que los garimpeiros están muy bien armados y que los brasileros han avanzado a pasos agigantados dentro del territorio esequibano. “Su objetivo es depredar este territorio y el nuestro es defender la naturaleza ante las amenazas que representan las transnacionales y los amantes del oro”
El Esequibo como República independiente, ¿es la solución?
Actualmente, según el representante indígena, Guyana cuenta con 980 mil habitantes, de los cuales más de 200 mil viven en el Esequibo. Proponen realizar un referendo para declararse República independiente, para así anexionarse, pacíficamente, a Venezuela. “Es nuestro sueño y le pedimos al presidente Chávez que nos apoye en esta cruzada... aquí estamos organizados y ese es el deseo de los 250 chamanes que conforman el consejo de ancianos “Aidamo Nobo”, del que soy delegado, porque Venezuela es el país que ha tenido más incidencia en nosotros”.
Henríquez ofreció un dato revelador y es que aseguró que “los venezolanos se resignaron, piensan que no hay forma de recuperar esas tierras, tanto así que en los textos escolares ya ni aparece como zona en reclamación. “Para declararnos país independiente y anexarnos a Venezuela, se requiere una absoluta conciencia por parte del gobierno venezolano y es posible recuperarlo sin disparar ni una sola bala”, concluyó.
