Para el
pueblo nativo americano Lakota, el nacimiento de un búfalo blanco con nariz,
ojos y pezuñas negras responde a una leyenda milenaria, aunque también contiene
una advertencia
El nacimiento
reportado de un raro búfalo blanco
en el Parque Nacional de Yellowstone cumple una profecía del pueblo de nativos
americanos Lakota, que presagia tiempos mejores, aunque también advierte
que podría ser una señal de que se debe hacer más para proteger la tierra y sus animales.
“El nacimiento de este becerro es a la vez una bendición y una advertencia. Debemos hacer más”, afirmó el Jefe Arvol Looking Horse, líder espiritual de los Lakota, Dakota y Nakota Oyate, en Dakota del Sur; y el decimonoveno guardián de la sagrada Pipa y Paquete de Mujer Becerro de Búfalo Blanco, en una entrevista con AP.
La llegada de
este animal sagrado se produce después de que un severo invierno en 2023 expulsara a miles de búfalos de Yellowstone,
también conocidos como bisontes, a elevaciones más bajas. Más de 1500 fueron asesinados,
enviados al matadero o transferidos a pueblos nativos que buscaban recuperar el
cuidado de un animal con el que sus antepasados vivieron durante milenios.
Erin Braaten, de Kalispell, una ciudad ubicada a orillas del
río Flathead en Montana, tomó varias fotografías de la cría, poco después de su
nacimiento el 4 de junio, en el valle de Lamar, en la esquina noreste del
parque. Tanto él como su familia visitaban el parque cuando vieron “algo realmente blanco” entre una
manada de bisontes, al otro lado del río.
El tráfico
terminó deteniéndose mientras los bisontes cruzaban la calle, por lo que Braaten sacó su cámara por la ventana para
verlo más de cerca con el zoom. “Miro y es esta cría de bisonte
blanco. Y quedé totalmente,
totalmente anonadada”, reveló.
La leyenda
indígena detrás de este espectacular nacimiento
Para los
Lakota, el nacimiento de un
ternero de búfalo blanco con nariz, ojos y pezuñas negras es similar a la segunda venida de Jesucristo, agregó
Looking Horse.
La leyenda
Lakota dice que hace unos 2000
años, cuando nada era bueno, la comida se estaba acabando y los bisontes
desaparecían, apareció la Mujer
Cría de Búfalo Blanco, le presentó una pipa y un paquete a un
miembro del pueblo, le enseñó a orar y dijo que la pipa podría usarse para
traer búfalos al área para alimentarse. Al irse, se convirtió en una cría de búfalo blanco.
“Y algún
día, cuando los tiempos vuelvan a
ser difíciles”, explicó Looking Horse al relatar la leyenda, “regresaré y estaré sobre la tierra como
un ternero de búfalo blanco, nariz negra, ojos negros, pezuñas negras”.
Troy Heinert, director ejecutivo del InterTribal Buffalo
Council, con sede en Dakota del Sur, manifestó que la cría en las fotos de
Braaten parece un verdadero búfalo
blanco porque tiene nariz negra, pezuñas negras y ojos oscuros.
“Por las
fotografías que he visto, ese ternero parece tener esos rasgos”, dijo con
firmeza Heinert.
Jim Matheson,
director ejecutivo de la Asociación Nacional del Bisonte, no pudo cuantificar
qué tan rara es la cría. “Que yo sepa, nadie ha rastreado nunca el nacimiento de búfalos blancos a lo largo de
la historia. Así que no estoy seguro de cómo podemos determinar con qué frecuencia ocurre”.
Además de los
rebaños de animales en tierras públicas o supervisadas por grupos
conservacionistas, alrededor de 80
pueblos nativos en todo Estados Unidos tienen consigo más de 20.000 bisontes,
una cifra que ha ido creciendo en los últimos años.
En
Yellowstone y sus alrededores, la matanza
o eliminación de grandes cantidades de bisontes ocurre casi todos
los inviernos, en virtud de un acuerdo entre agencias federales y de Montana,
que ha limitado el tamaño de las
manadas del parque a unos 5000 animales. Los funcionarios de Yellowstone
propusieron la semana pasada una población ligeramente mayor, de hasta 6000
bisontes, y se espera una decisión final el próximo mes.
Pero los
ganaderos de Montana se han opuesto durante mucho tiempo a aumentar los rebaños
de Yellowstone o transferir los
animales a los nativos americanos. El gobernador republicano Greg Gianforte ha dicho que
no apoyaría ningún plan de gestión con una población objetivo superior a 3000
bisontes de Yellowstone.
Heinert ve el
nacimiento del ternero como un recordatorio “de que debemos vivir bien y tratar
a los demás con respeto”. “Espero que
la cría esté a salvo y viva lo mejor que pueda en el Parque
Nacional de Yellowstone, exactamente donde debe estar”, finalizó el
especialista.
Tomado de LA NACION / Argentina. Imagen: Erin Braaten/Dancing Aspens Photography vía
AP.