La campaña inspirada por Francia
junto con el Reino Unido para derrocar al exlíder libio Muamar Gadafi en 2011
fue un error que llevó a consecuencias catastróficas, afirma el que fue el jefe
del espionaje francés en Libia en aquel momento.
La decisión del expresidente francés Nicolás
Sarkozy de respaldar a los rebeldes contra Gadafi después de haber entablado
una relación con el coronel libio fue "incomprensible", escribió el antiguo jefe de la Dirección
General de Seguridad Exterior (DGSE) en Trípoli, Jean-Francois Lhuillier,
citado por The Times.
"La operación militar estuvo brillantemente dirigida, pero no se pensó políticamente y tuvo consecuencias desastrosas. Hubo engaño allí porque Gadafi estaba tendiendo la mano a Occidente. No solo no tomamos la mano que nos tendía, sino que además le cortamos la cabeza", expresó el analista a la cadena de televisión France 2.
Este hecho lo calificó de
"completamente inmoral", porque, según él, Occidente
eliminó a Gadafi y destruyó
su país sin preocuparse de que fuera un "baluarte contra
el terrorismo islamista".
"Las consecuencias de esta
desastrosa expedición no estaban previstas. Era incomprensible por qué Sarkozy
quisiera su cabellera", agregó Lhuillier.
Recordó también en este contexto que
el expresidente de Francia mantenía estrechas relaciones con el círculo íntimo
de Gadafi, que declara
haber entregado millones a Sarkozy.
A pesar de que el exjefe de espionaje
niega las afirmaciones de que agentes franceses mataran al exlíder libio —quien
murió tras ser golpeado por rebeldes en octubre de 2011, confirma que fuerzas
del “servicio de acción” de la DGSE operaban con los rebeldes en Libia e indica que el Servicio
Aéreo Especial británico también estaba involucrado en ello.
La operación aliada, en la que
franceses y británicos bombardearon a las fuerzas de Gadafi y armaron a los
rebeldes, se organizó después de que Sarkozy convenciera al ex primer ministro
del Reino Unido, David Cameron, para que se uniera a ella, destaca el medio.
Tomado
de Sputnik / Rusia. © AP Photo / Francois Mori.