Se trata de presuntos miembros de las bandas armadas que sumido
en la inseguridad y la violencia al país antillano.
Al menos 160 presuntos bandidos han
sido perseguidos, linchados y quemados vivos en Haití desde el
lanzamiento en abril pasado de la
llamada operación "bwa kale", dirigida a eliminar físicamente a
miembros de las bandas armadas que causan estragos en todo el país, informó un
organismo independiente de derechos humanos.
"Se trata de una reacción popular frente a la extrema crueldad de las bandas, porque las fuerzas del orden son impotentes, el Estado es incapaz de utilizar su monopolio de violencia legítima, y la comunidad internacional da vueltas y se enreda en la retórica de las promesas", dijo el Centro de Análisis y Búsqueda en Derechos Humanos (CARDH), que presentó los datos.
De estos presuntos linchamientos,
134 se han ejecutado en Oeste, y 9 en Artibonite que son dos de los
departamentos de Haití más afectados por los actos violentos de las bandas
criminales.
Citando fuentes locales, el diario
Le Nouvelliste reportó la muerte de dos personas producto de enfrentamientos
ocurridos este mismo viernes "entre el grupo armado Gran Grif y el grupo
dirigido por Ti Mepri" en la comuna de Petite-Rivière-de-l'Artibonite".
Bajan secuestros y asesinatos
Según el informe de CARDH, producto
de los linchamientos se redujeron drásticamente los secuestros entre el 24 de
abril y el 24 de mayo de 2023, así como otras manifestaciones de violencia de
las bandas.
Durante este período, casi no se
produjeron secuestros individuales, y el país sólo fue testigo de 43
asesinatos, frente a los 146 de todo abril.
"Este movimiento debe ser
vigilado para garantizar una seguridad duradera, de lo contrario la respuesta
de las bandas será peor que las atrocidades que precedieron a bwa kale",
argumentó el CARDH, señalando una masacre perpetrada por bandidos en venganza
contra la brigada ciudadana que dejó 12 muertos.
La ONG considera que el movimiento
civil es una reacción ante una población que ha quedado a merced de las bandas
armadas.
Haití atraviesa por una crisis en
prácticamente todos los órdenes y el Gobierno ha solicitado -sin encontrar
respuesta sólida- el auxilio de una fuerza militar internacional que frente el
accionar de las bandas para pacificar el país y poder acometer otros grandes
males que afectan al país más deprimido del continente.
Este viernes, la Organización de
las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), expuso que 4,9
millones de personas en Haití, casi la mitad de la población,
padece hambre aguda, un aumento de 200.000 personas en solo cinco
meses.
jc (efe, Le Nouvelliste) / Tomado de DW / Alemania.