La mujer busca ayuda para contactar con los padres de la niña
desaparecida en Portugal hace 16 años asegurando que la policía no la cree y
que quiere someterse a la prueba de ADN
Una joven polaca de 21 años ha incendiado internet en las
últimas horas tras asegurar que ella es, nada más y nada menos, que Madeleine
McCann, la niña inglesa desaparecida en Portugal hace ya 16 años.
Tal afirmación ha corrido como la pólvora junto con las imágenes que la propia joven ha compartido en una cuenta de instagram con la intención de poder hablar con la familia McCann ya que, asegura la supuesta Maddie, la policía no la toma en serio.
En este perfil social la mujer confiesa que sufrió abusos de niña
por parte de un pederasta alemán que se encuentra entre los sospechosos de la
desaparición de la pequeña McCann. Explica que sus propios padres no son claros
con ella a la hora de explicar cómo llegó a su hogar de niña y comparte además
una serie de imágenes de su infancia y adolescencia en las que guarda un
importante parecido con las fotos de la niña desaparecida en el Algarve
portugués.
La joven polaca también se ha grabado en vídeo, hablando
directamente a cámara y señalando aquellos rasgos de sus facciones que, dice,
se asemejan a los de los de Kate y Gerry McCann.
Con esta campaña solicita poder hablar con los padres de
Maddie y someterse a las pruebas de ADN pertinentes para demostrar su teoría o
desmentirla. En sus publicaciones compara las reconstrucciones que se han
realizado de cómo sería la pequeña Madeleine con el paso de los años con sus
propias imágenes en distintas etapas y señala rasgos muy concretos como una
mancha en el iris o la forma de las orejas y los labios para tratar de probar que
ella misma podría ser la niña desaparecida.
Su cuenta de instagram tiene cerca de 400.000 seguidores,
muchos de los cuales aprecian el parecido físico y comentan que «ojalá» este
sea el desenlace de uno de los casos sin resolver más mediáticos de los últimos
años.
La desaparición de Madeleine McCann
Madeleine McCann era una niña inglesa que desapareció en el
Algarve portugués, donde se encontraba de veraneo con sus padres y sus hermanos
menores, el 3 de mayo del año 2007 cuando tenía tres años de edad. Según la
versión de los McCann y de los amigos con los que se encontraban de vacaciones,
la pequeña se esfumó una noche de su cuarto sin dejar rastro.
El caso causó una gran expectación a nivel internacional y
sus fotos dieron l avuelta al mundo. Desde el principio se barajaron numerosas
hipótesis sobre su desaparición, la que más fuerza ha cobrado con el paso del
tiempo es que fuese secuestrada. El pasado mes de mayo de 2022 las autoridades señalaron a
Christian Brueckner, un alemán de 43 años con antecedentes de pedofilia,
que se encontraba en las fechas del suceso en la zona donde veraneaban los
McCann y, según revelaba entonces el diario The Sun, un investigador habría
econtrado evidencias que le relacionarían con el posible secuestro de la niña.
Presentaron cargos contra él y la policía alemana dio por
supuesto que este pederasta había secuestrado, abusado y hecho
desaparecer a la pequeña, aunque nunca ha aparecido su cuerpo.
Sea como fuere su familia nunca se ha dado por vencida
y sus padres llegaron a ser
sospechosos para el comisario que dirigió la investigación en
Portugal, extremo que nunca fue probado. Desde aquel 3 de mayo de 2007 no se ha
vuelto a tener rastro de la niña ni tampoco evidencias que hagan pensar que
murió.
Tomado de Burgosconecta / España.