En el último debate, el expresidente se vio mucho mejor que un Bolsonaro que se notaba muy nervioso
Entre Todos D.
Varios medios posicionan al expresidente brasileño Luiz
Inácio Lula da Silva (2003-2011) como el claro ganador de cara cara
televisado que sostuvo frente a su contrincante electoral, el actual mandatario
Jair Bolsonaro.
“Lula fue más firme e incisivo, mientras que el presidente Bolsonaro estuvo a la defensiva y se mostró alterado en varias ocasiones”, escribe la agencia de noticias rusa Sputnik sobre el debate, que es visto como la última oportunidad de ambos candidatos para convencer a los indecisos antes del 30 de octubre.
El abanderado presidencial del Partido de los Trabajadores
(PT) preguntó al actual inquilino del Palacio de Planalto sobre su estrategia
para reinsertar a Brasil en el mundo. Y, al ver que el presidente
ultraderechista no respondió de inmediato, Lula agregó que Bolsonaro no tenía
relación con ningún país del mundo y que sabía que la política exterior durante
su administración de 2003-2011 fue “la más eficaz”.
“Brasil era un gran protagonista internacional durante mi
gestión…Nadie quiere conversar con Brasil y ningún país quiere recibir a
Bolsonaro”, recalcó Lula.
Bolsonaro tampoco respondió y solo llamó a Lula “mentiroso”,
cuando este último le preguntó por qué no había aumentado el salario mínimo en
los últimos años y recordando que él, en sus años de gobierno, lo subió más de
un 70 por ciento.
Los candidatos se acusaron mutuamente de estar a favor del
aborto. Lula leyó un discurso de 1992 en el que el mandatario, como diputado,
defendió en el Congreso el uso de pastillas anticonceptivas, llamadas
"pastilla de aborto" por el candidato del PT.
"Usted es abortista convencido. No tiene ningún respeto
con la vida", respondió Bolsonaro, visiblemente nervioso tras la
acusación. Más tarde, levantó los brazos y aludió a Dios en un guiño al
electorado evangélico.
Otro momento en que Bolsonaro estuvo a la defensiva fue
cuando se abordó en el debate el caso del exdiputado Roberto Jefferson, un
aliado del presidente que días atrás se resistió a ser detenido y disparó
contra la policía.
Las últimas encuestas apuntan a un desenlace muy ajustado en
las elecciones del domingo; según el sondeo del instituto de opinión Datafolha del
27 de octubre, Lula tendría el 49 por ciento de los votos totales, frente al 44
por ciento de Bolsonaro.