Ser miembro de la realeza exige una buena dosis de
resiliencia, una piel dura, y paciencia a raudales. Para un rey en modo de
espera, esto último ha sido especialmente cierto.
El príncipe Carlos fue
el heredero más longevo, ya que pasó 63 años como príncipe de Gales. En este
sentido, es el heredero de mayor edad en convertirse en rey, con 72 años.
"La accesión está cuidadosamente planificada, al igual que los preparativos para el funeral de la Reina, por lo que inicialmente la transición será tranquila. Después, mucho dependerá de la respuesta ciudadana a la coronación de Carlos, de cómo se comporte el propio Carlos, y del apoyo que preste el Gobierno", dijo a DW por correo electrónico Robert Hazell, profesor de Gobierno y Constitución en el University College de Londres.
Juego de tronos
El Príncipe Carlos ha tenido mucho
tiempo para acostumbrarse a una vida siendo el centro de atención. Carlos se
graduó en el Trinity College de Cambridge en 1970 antes de iniciar una carrera
militar que culminó con el mando del dragaminas HMS Bronington.
Se casó con Diana Spencer,
entonces una mujer de 20 años con considerable sangre real, en el verano de
1981, en medio de una gran fanfarria mediática. La princesa Diana, o Di,
como se la conocía, gozaba de una gran popularidad y era escudriñada por la
prensa. Años
de cotilleos y escándalos acabaron en su divorcio, en 1996. Diana
murió en un accidente de coche en 1997.
En ese momento, se informó de que
Carlos había dicho a Diana: "¿De verdad esperas que sea el primer príncipe
de Gales que no ha tenido una amante?", en referencia a su amor de toda la
vida, Camilla Parker Bowles, con quien se casó en 2005.
Hubo un Carlos mujeriego, y hay un
Carlos filántropo. Además de apoyar a la fundación caritativa Prince's Trust,
colaboró con otras organizaciones benéficas, ha respaldado programas de
educación para jóvenes y financió iniciativas artísticas, por nombrar algunas.
Como rey, se espera que Carlos siga
promoviendo la diversidad religiosa y el carácter multicultural de la
Inglaterra moderna. También ha prometido celebrar una coronación
multiconfesional cuando ascienda al trono.
Sin embargo, su principal pasión son
el medioambiente y la lucha contra el cambio climático. En 2007 puso en
marcha el Proyecto de la Selva Tropical del Príncipe, una iniciativa mundial
que cuenta con el respaldo de empresas, políticos y personalidades para crear
conciencia y actuar contra la deforestación tropical.
Parcialidad en la política
Para bien o para mal, Charles
carece del instinto de su madre para mantenerse imparcial en cuestiones
políticas o sociales. En el pasado, no ha reprimido sus opiniones.
Como rey, Carlos tendrá que frenar
esas inclinaciones, dijo Hazell. "El monarca tiene que ser
escrupulosamente neutral en todas las cuestiones políticas, como lo ha sido la
reina. En su audiencia semanal con la primera ministra, Liz Truss, Carlos
tendrá la oportunidad de expresar sus puntos de vista, ejerciendo su trío de
derechos según Walter Bagehot, [autor de la Constitución inglesa]: ser
consultado, incentivar y advertir."
Si fuera más allá de eso, dijo
Hazell, "esperaría que el gobierno le recordara los deberes de un monarca
constitucional".
En pocas palabras, su aceptación y
popularidad pueden depender de si "Charles se mete en problemas, y de los
acontecimientos, que son siempre imprevisibles", dijo Hazell.
(gg/cp) Tomado de D.W / Alemania.