La cantante Gulsen Bayraktar Colakoglu, de 46 años, permanece
en prisión a la espera de juicio
MIKEL AYESTARAN
La cantante Gulsen Bayraktar Colakoglu, icono pop de Turquía, ha sido detenida bajo la acusación de «incitar al odio» por una supuesta broma sobre una escuela religiosa. Los hechos que se le imputan a la artista se remontan a un concierto celebrado en abril en el que bromeó con el teclista del grupo, apodado 'imán', diciendo ante el público que «su perversión viene de estudiar en las escuelas Imán Hatip», una cadena de instituciones educativas de secundaria con vocación religiosa. La artista, de 46 años, permanece en prisión a la espera de juicio.
De poco le han servido a la cantante las disculpas que hizo
públicas a través de Twitter, donde su cuenta tiene más de un millón y medio de
seguidores. Gulsen escribió que sus palabras sobre el escenario fueron «un
chiste que compartí con mis colegas, con quienes he trabajado durante muchos
años, que fue difundido por aquellos que buscan polarizar a la sociedad». Ante
ella caen las acusaciones de la cúpula del gobernante Partido de la Justicia y
el Desarrollo (AKP), cuyo ministro de Educación condenó «unas palabras que
contienen insultos y calumnias contra una comunidad». Palabras similares
pronunciaron los responsables de Justicia y Cultura. Y el portavoz del AKP,
Ömer Çelik, fue contundente al asegurar que «apuntar a un segmento de la
sociedad con la acusación de 'perversión' y tratar de polarizar a Turquía es un
crimen de odio y una vergüenza para la humanidad».
«Medida desproporcionada»
La defensa a la artista llegó desde el opositor Partido
Republicano (CHP), cuyo líder, Kemal Kilicdaroglu, pidió su liberación
inmediata y señaló a los islamistas como responsables de «tomar una broma para
intentar enfrentar a los jóvenes del país entre ellos». Frente a las
acusaciones, el abogado de Gulsen argumentó que se trata de «una medida
desproporcionada, mi cliente no ha cometido ningún crimen».
La estrella del pop turco, autora de hits como 'Lolipop', que
cuenta con trece millones de visualizaciones en YouTube, ya estuvo también
señalada por los sectores conservadores debido a su apoyo al colectivo LGBTQ en
el país y en las redes sociales del país interpretan esta detención como un
intento de Recep Tayyip Erdogan de consolidar el apoyo del votante religioso
antes las elecciones previstas para dentro de diez meses. El presidente y
muchos miembros de su partido son graduados de escuelas religiosas, que se
establecieron hace décadas con el objetivo original de educar a imanes.
Tomado de ideal.es / Titulo de ETD.