Entre Todos D.
Los Vicerrectores Administrativos de las Universidades Nacionales, representados por José Ángel Ferreira *(Universidad de Carabobo)*, Amalio Belmonte *(Universidad Central de Venezuela)*, Tahís Pico *(Universidad de Oriente)*, Arnaldo Escalona *(Universidad Nacional Abierta)*, Manuel Aranguren *(Universidad de Los Andes)*, Mazra Morales *(Universidad Experimental Politécnica Antonio José de Sucre)*, Martín Paz *(Universidad Nacional Experimental del Táchira)*, Edgar Alvarado *(Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado)*, y José Luis Rondón *(Universidad Pedagógica Experimental Libertador)*, se dirigen a la comunidad universitaria con ocasión de los últimos eventos ocurridos respecto a los derechos laborales de nuestro personal docente, administrativo y obrero, relacionados con la modificación de los términos y condiciones de tablas salariales y demás beneficios que ha mantenido la comunidad universitaria, en algunos casos con décadas de vigencia en las universidades nacionales.
Es ampliamente conocido que existen
beneficios derivados de la Normativa Laboral del Sector Universitario y de las
actas y convenios internos particulares de cada universidad. Es así como, desde
el año 2008 (con antecedentes de acuerdos federativos en el año 2004 y 2005),
por mandato de lo establecido en la Convención Colectiva de Trabajo suscrita en
el marco de una Reunión Normativa Laboral para los Trabajadores Administrativos
de las Universidades Nacionales e Institutos y Colegios Universitarios año
2008/2010, aprobada igualmente para el sector obrero, *se estableció una prima
de antigüedad calculada de acuerdo al número de años de servicio que tenga el
trabajador: salario normal x 1,5% x N° de años de servicio en instituciones de
educación universitaria*.
Dicho beneficio, se mantuvo en las
mismas condiciones en las subsiguientes Convenciones Colectivas Únicas (I, II y
III) del Sector Universitario iniciadas en el año 2013. Fue modificada en
aumento su base de cálculo a partir del mes de Enero del año 2020, mediante
Instructivo emanado del MPPEU, estableciendo el “2% del salario normal
multiplicado por los años de servicio en el Sistema de Educación Superior”.
Asimismo, se mantuvo vigente en las mismas condiciones en el acta de fecha
28/07/2021, suscrita por el MPPEU, MPPPST y la FTUV, donde se aprobaron
beneficios correspondientes a la IV Convención Colectiva Única del Sector
Universitario, a partir del 01/08/2021.
Sin embargo, en el reciente
instructivo enviado por el MPPEU con base en directrices de la Onapre, luego
del incremento salarial decretado por el Presidente de la República, con
vigencia desde el 15/03/2022, *se obvia lo acordado en las referidas
convenciones y se nos informa a través de los funcionarios del MPPEU, Opsu y
Onapre, la modificación de la fórmula de cálculo cuando se establece que todo
el personal con 23 o más años de servicio en instituciones de educación
universitaria, recibirá una prima de antigüedad calculada de la siguiente
manera: salario normal x 30% x 23 años, lo cual disminuye sustancialmente el
ingreso mensual de los todos los trabajadores universitarios*.
Con esta decisión, insistimos,
unilateral, se está estimulando el proceso de jubilación temprana y la
desvalorización de la labor de todos los trabajadores universitarios,
contribuyendo a la descapitalización del recurso humano vía renuncias.
Así mismo, objetamos la disminución
o eliminación de otras primas provenientes de convenciones colectivas
individuales anteriores para cada universidad y de la normativa interna de cada
una de ellas, además de las presentes en la actual convención como la prima
profesional y la de actividad universitaria.
Lo expuesto, con respecto a las
últimas decisiones del Ejecutivo en cuanto a modalidades y contenido de la
cancelación de las quincenas, produjo un caos inmenso que retardó de manera
ostensible los pagos de la semana pasada en casi todas las nóminas de las
universidades del país. A ello debe agregarse la sorpresiva modalidad de pago
mediante cámara de compensación distinto a la Plataforma Patria, vía Banco de
Venezuela.
Esta novedad impidió que muchos
trabajadores en la mayoría de las universidades no pudieran cobrar a tiempo,
dado que quedaron sin validar numerosas cuentas que han sido corregidas
progresivamente.
Al día de hoy vivimos una situación
de incertidumbre, ya que los trabajadores universitarios no saben qué están
cobrando, se cobra tarde, unos cobran en una fecha y otros en otra fecha.
Aunado a todo lo planteado, existe el problema de los pagos de los aportes y
retenciones de cajas de ahorro, casas comerciales, gremios y sindicatos, fondos
de jubilaciones, Seguro Social obligatorio, régimen prestacional de empleo,
Impuesto sobre la Renta, Banavih, pensiones alimentarias y otros, que no han
sido enviados por el Ministerio de Educación Universitaria.
En síntesis, la Plataforma Patria
ha traído desasosiego, desorientación, incertidumbre y para nada ha beneficiado
a la comunidad universitaria del país. Es por ello que se hace evidente y
necesario que se tomen acciones para corregir este procedimiento cuya ineficacia
se ha comprobado y retornar al sistema que funcionaba, y que en términos de la
autonomía de las universidades, nos corresponde por ley, siempre bajo la
directriz del MPPEU.
Con base en lo argumentado hacemos
un llamado claro, sincero y respetuoso para la vuelta a la normalidad de los
beneficios salariales que corresponden a los trabajadores universitarios; para
que se respeten sus derechos humanos y laborales; para que se aplique la
Constitución y la progresividad de los derechos de los trabajadores; para que
en el marco de las reservas legales correspondientes actuemos juntos para
consolidar un proceso de bienestar de los universitarios del país y con ello,
para el beneficio del futuro de la nación.
Unamos esfuerzos para buscar
soluciones a una situación que merece atención especial y en ese sentido, es
imprescindible juntar los equipos técnicos de las universidades y sus
autoridades con los funcionarios del MPPEU, para construir una opción que
permita solventar las actuales circunstancias, cuyas consecuencias son visibles
y obviamente entorpecen el porvenir de los venezolanos.