Vistas de página en total

10 septiembre, 2021

HACE 40 AÑOS


 Por Pedro Mosqueda

"Señoras y señores, les informo que han viajado con un compañero muy especial... que ha vuelto hoy a España y que venía también en el avión".

Al conocer la noticia, todo el mundo aplaudió la noticia o anunció de Isubel Almazán, Capitán del Boeing 747, un Jumbo identificado con el nombre de Lope de Vega, con capacidad para 400 pasajeros y en ese vuelo cargan solo 319 personas y el último exiliado de la cruenta guerra civil española.

Destacaba en el vuelo una comitiva especial que trabajo en la certificación y cumplimientos protocolares para tan especial ocasión; apenas el avión arrastró sus ruedas en la pista del Aeropuerto de Barajas, todos los que se asomaron por las ventanillas, observaron las cámaras de TV, reporteros y demás corrí corrí, entendieron entonces que eran testigos presenciales, hábiles y contestes de un acontecimiento histórico importante.

El propio Adolfo Suárez acompañado de gran parte de su gabinete, y la guardia uniformada de gala y provista de tricornio para la ocasión, acudió al pie de la escalerilla y no era para menos: la llegada del Guernica de Picasso, una de las obras pictóricas más emblemáticas de la historia de arte, cerraba un capítulo de la historia política reciente de España.

Es una historia compleja y  se cumplió con Picasso, el Guernica regresaría a España,  solo y cuando se recuperará la democracia, así fue...

El famoso cuadro, que denuncia los bombardeos alemanes a la ciudad de Guernica, su primer destino fue El MOMA en New York y restablecida la democracia hubo mucho forcejeos para su devolución, al punto que Adolfo Suárez amenazó con demandar; en España, su primer destino fue el Casón del Buen Retiro (cercano al Museo El Prado); allí permaneció hasta 1992 cuando fue trasladado al Centro del Arte Reina Sofía.

Hoy hace 40 años fue complacida la petición de Pablo Picasso.