Rafael “Negro” Blanco*
Para las nueve de la mañana de este
26 de Abril del 2021, necesitamos echar mano de
2.780.022,48 bolívares para poder hacernos apenas de un (01) dólar.
La moneda norteamericana se ha
convertido de hecho en el instrumento de cambio nacional pero el grueso de los
trabajadores y pensionados solo cobramos bolívares.
La economía venezolana viene sufriendo desde el 2014 para acá un severo y sostenido desplome que la ha llevado a perder más de la cuarta parte de su producto interno bruto (PIB) como consecuencia de recurrentes errores macroeconómicos que nos han conducido a tener la más alta inflación del planeta, recesión, un sistemático desabastecimiento y a ganar el primer puesto del índice de miseria mundial.
Todos esos errores no son sólo
económicos, también lo son políticos. La administración Maduro no ha tenido la
fortaleza política, ni la sapiencia económica para engrandecer al país y hoy es
tan pobre su desempeño que sólo desea endosarle su fracaso al Gobierno Interino
y a las sanciones.
Señalaba el gobierno en días
recientes que no pagaba el sistema COVAX para traer las vacunas contra el
coronavirus por falta de fondos líquidos disponibles de Venezuela,
sancionados y restringidos en EEUU. Cuando los Interinos agenciaron 30 millones
de dólares para tal fin construyeron un obstáculo y terminaron apareciendo el
dinero para pagar ellos mismos. Ya habían cumplido el objetivo político de
evidenciar el efecto de las sanciones solicitadas por la oposición en el
pueblo. Qué importan los muertos, son solo bajas del enfrentamiento político.
Las cosechas son irrecuperables,
las pérdidas cuantiosas y las quiebras siguen sumando debido a la escasez del
gasoil, pero no se tomaron las previsiones correspondientes para demostrar que
las sanciones internacionales son la causa de la tragedia y ahora anuncian
resolver el problema del gasoil en 60 días, cuando ya el daño está causado.
Pero se consumó su objetivo: demostrar la influencia de las sanciones en la
vida general del venezolano.
La semana pasada pudimos leer en
Bloomberg que Venezuela no podrá acceder a la donación de 5.000 millones de
dólares de derechos especiales de giro del Fondo Monetario Internacional debido a
la exclusión del Gobierno de Maduro del Sistema Financiero Global como
consecuencia de las sanciones estadounidenses a solicitud de la oposición.
La guerra política interna está
cerrando las puertas que tiene Venezuela para paliar la situación.
Por causas políticas esa donación
equivalente al 81% de las reservas internacionales de nuestro país no llegarán,
y desde Unión Progreso Carabobo nos preguntamos: ¿cuántos muertos más hacen
falta? ¿Cuantas empresas fallidas más se requieren? ¿Cuantas cosechas más han
de perderse? ¿A cuánto más debe elevarse nuestro índice de miseria para que
cese este catastrófico enfrentamiento?
El año pasado dijimos que no íbamos
a callar. Unión y Progreso llegó para darle sonido a las voces mudas de la
pobreza y la desolación en Venezuela, y con el favor de Dios así será.
*Coordinador de Unión y Progreso en
Carabobo.
Instagram: @rafaelnegroblanco
Twitter: @rnegroblanco