© Sputnik / Alexei Danichev
En la última cumbre de los BRICS, los
países miembros apoyaron la idea de introducir un sistema de pago común,
alternativo al SWIFT, para realizar pagos en monedas nacionales. En una
entrevista exclusiva con Sputnik, Natalia Staprán, del Ministerio de Desarrollo
Económico de Rusia, señaló que China está estudiando con gran interés el
proyecto.
El actual procedimiento para realizar
transacciones de comercio exterior a través del SWIFT preocupa a muchos: dado
que el SWIFT está controlado por Estados Unidos, el sistema puede ser utilizado
como herramienta de presión política.
Por ejemplo, Estados Unidos ya ha desconectado a Irán del SWIFT, lo que provocó una caída
del PIB y de las exportaciones del país, aumentó la inflación y llevó a una
devaluación de la moneda nacional. En algunas ocasiones, Washington amenazó a
Rusia con desconectarla del SWIFT.
China no tenía prisa con la
desdolarización ni la transición a sistemas de pago alternativos. Sin embargo,
el conflicto comercial con Estados Unidos ha demostrado que es muy arriesgado
depender de la infraestructura financiera estadounidense, comentó a Sputnik
Natalia Staprán, directora del departamento de cooperación económica
multilateral del Ministerio de Desarrollo Económico de Rusia.
Sin embargo, el sistema de pagos
propio CIPS apareció en China ya en 2015. Ahora son más de 20 bancos locales y extranjeros
que están conectados a este sistema. Permite realizar pagos transfronterizos
directos en yuanes. Rusia tiene una solución similar: sistema de transferencia
de mensajes financieros. Además, la India está trabajando en un sistema
similar.
Dado que los países del BRICS ya
tienen experiencia en desarrollar sus propios sistemas de pago, en la última
cumbre de Brasilia se propuso unir esfuerzos y crear un mecanismo común y
alternativo para los pagos mutuos.
Lo importante es que haya interés por
parte de los participantes de las operaciones, comentó a la agencia
Andréi Bokariov, director del Departamento de Relaciones Financieras
Internacionales del Ministerio de Finanzas de Rusia.
"En primer lugar, son los bancos
y las empresas de nuestros países. Debe haber una clara demanda e interés en
crear tales sistemas. De lo contrario, el mecanismo no tendrá suficiente
demanda", señaló.
Según el funcionario, ahora los
países están buscando mecanismos mutuamente aceptables para todos los estados
miembros del grupo BRICS.
"Desde el punto de vista de la
parte rusa, uno de los primeros pasos podría ser la creación de un sistema de
transmisión de mensajes sobre las transacciones financieras —un análogo del
SWIFT—. Este sistema ya se utiliza para los pagos en Rusia y con algunos de
nuestros contratistas. Aquí estamos pensando en extender ese esquema a los
cinco".
La demanda de estos sistemas por
parte de los participantes del mercado dependerá de la comodidad del uso de un
sistema alternativo al SWIFT. No basta con aumentar el volumen de operaciones,
sino que también hay que utilizar una interfaz cómoda.
En otoño se informó que Rusia y China
pueden conectar dos sistemas nacionales propios para realizar pagos mutuos sin
necesidad de recurrir al SWIFT. De esta manera, ambos lados trabajarán en una
plataforma conveniente sin ninguna dificultad. Al mismo tiempo, nada impide
ajustar el sistema para otros miembros del BRICS.