Aunque se sabe de sobra que la actividad física es
importante para la salud del corazón, ni la investigación ni las
recomendaciones diferencian constantemente los beneficios de los diferentes
tipos de actividad física. Un nuevo trabajo, presentado en 'ACC Latin America
Conference 2018', que se celebra en Lima, Perú, encontró que, aunque toda
actividad física es beneficiosa, las actividades estáticas, como el
entrenamiento de fuerza, se asocian más fuertemente con la reducción de los
riesgos de enfermedades cardiacas que las actividades dinámicas como caminar y
montar en bici.
"Tanto el entrenamiento de fuerza como la actividad
aeróbica parecían ser saludables para el corazón, incluso en
pequeñas cantidades, a nivel de la población", dice Maia P. Smith,
epidemióloga estadística y profesora asistente en el Departamento de Salud
Pública y Medicina Preventiva en la Universidad de St. George en St. George, en
la isla de Granada.
"En cualquier caso, los clínicos deben aconsejar a los
pacientes que hagan ejercicio, ya que ambos tipos de actividad fueron
beneficiosos. Sin embargo, la actividad estática parecía ser más beneficiosa
que la dinámica, y los pacientes que realizaron ambos tipos de
actividad física obtuvieron mejores resultados que los pacientes que
simplemente aumentaron el nivel de un tipo de actividad", subraya.
Los científicos analizaron los factores de riesgo
cardiovascular, como la presión arterial alta, el sobrepeso, la diabetes y el
colesterol alto, en función de la actividad estática y/o dinámica que dijeron
hacer (entrenamiento de fuerza o caminar/andar en bicicleta) en 4.086 adultos
estadounidenses utilizando datos de la 'Encuesta Nacional de Examen de
Salud y Nutrición 2005-2006. Luego, los investigadores ajustaron la edad,
el origen étnico, el género y el tabaquismo y estratificaron los datos por
edad: de 21 a 44 años o más de 45 años.
Los ejercicios de fuerza y dinámico, igual de populares en
mayores y jóvenes
En total, el 36 por ciento de los adultos jóvenes y el 25 por
ciento de los adultos mayores participaron en actividades estáticas, y el 28
por ciento de los adultos jóvenes y el 21 por ciento de los adultos mayores
participaron en actividades dinámicas. Los científicos encontraron que
participar en cualquier tipo de actividad se vinculó con tasas de factores de
riesgo de enfermedad cardiovascular entre un 30 y un 70 por ciento más bajas,
pero las asociaciones fueron más fuertes para la actividad estática y en los
jóvenes.
Tanto el entrenamiento de fuerza como la actividad aeróbica
parecían ser saludables para el corazón, incluso en pequeñas cantidades, a
nivel de la población, dice Maia P. Smith.
"Una conclusión interesante fue que tanto la actividad
estática como la dinámica eran casi tan populares en las personas mayores como
en las más jóvenes", afirma Smith. "Creo que esto les da a los
médicos la oportunidad de aconsejar a sus pacientes mayores que encajarán bien
en el gimnasio o de correr en la carretera. Lo importante es
asegurarse de que estén realizando actividad física", añade.
Smith considera que las futuras investigaciones y la
recopilación de datos deberían usar definiciones de actividad física que
separen la actividad estática de la dinámica para investigar más a fondo los
efectos independientes.
Fuente: ECOticias.com