Carlos López. Madrid.
Una serie de nuevas dataciones, que retrasan hasta cerca de los 66.000 años la antigüedad de las pinturas
de las cuevas de Ardales (Málaga), Maltravieso (Cáceres) y La Pasiega
(Cantabria), atribuyen ahora su autoría a los neandertales y las convierten en las más antiguas conocidas hasta el momento en el mundo.
Un
equipo multidisciplinar de catorce expertos, asociados a distintas
instituciones científicas como el Instituto Max Planck (Alemania), el
Centro Nacional para la Investigación Científica (Francia), las
universidades británicas de Southampton y de Durham, además de la de
Lisboa (Portugal) y las españolas de Alcalá, Barcelona, Isabel I
(Burgos), y Cádiz, entre otras, ha dado a conocer hoy este importante
descubrimiento en el último número de la revista americana "Science".
De
forma simultánea, dos de estos mismos investigadores publican, junto a
otros autores, un segundo artículo en "Science Advances", que ofrece una
antigüedad de entre 115.000 y 120.000 años para el yacimiento de la
cueva cartagenera de los Aviones, donde se encontraron conchas pintadas y
perforadas que, en opinión de los especialistas, estarían vinculadas
con decoraciones corporales empleadas por los neandertales (Homo
neanderthalensis).
Un
descubrimiento que, según mantiene en declaraciones a Efe el
investigador de la Universidad de Barcelona y del ICREA, Joao Zilhão,
confirma que "los neandertales utilizaban mezclas de pigmentos
sofisticadas y practicaban la ornamentación del cuerpo, incluso mucho
antes de que tales conductas se hayan podido documentar entre los
primeros hombres modernos de África".
Ambos
artículos constituyen una relevante aportación al actual debate
científico sobre el reconocimiento de las primeras capacidades
simbólicas y artísticas de la humanidad, que hasta hace poco la mayoría
de los expertos sólo reconocían a nuestra especie: el Homo sapiens.
Las
nuevas dataciones de las cuevas de Ardales, Maltravieso y La Pasiega,
que certifican una antigüedad remota hasta ahora insospechada para los
orígenes de la actividad artística en el género humano, han sido
posibles gracias al método de Uranio-Torio (U-Th), que mide el tiempo
tomando como base la desintegración radiactiva del uranio de las costras
de calcita asociadas a las pinturas.
En
concreto, las conclusiones de la investigación determinan que una mano
pintada en negativo en Maltravieso fue realizada al menos hace 66.700
años, y que una formación de calcita fue cubierta de pintura hace al
menos 65.500 años en la gruta de Ardales. Además, revelan que un signo
lineal con forma de escalera de la caverna de La Pasiega cuenta con
cerca de 64.800 años.
Las muestras
fueron procesadas por los investigadores Alistair Pike y Chris
Standish, de la Universidad de Southampton, y Dirk Hoffmann, del
Instituto Max Planck, quienes tomaron para sus mediciones unos pocos
miligramos de depósitos de calcita existente bajo y sobre las pinturas,
consistentes en distintos motivos en color rojo.
En
declaraciones a Efe, otro de los autores del artículo, el profesor de
la Universidad Isabel I de Burgos Marcos García, explica que las
fechas obtenidas en esta investigación "son anteriores al menos en
20.000 años a la llegada de los primeros humanos modernos a Europa y certifican su autoría por parte de grupos humanos neandertales".
En
los últimos años, varios descubrimientos ya venían proponiendo que
algunos grupos humanos anteriores al H.sapiens se decoraban el cuerpo
con tonos ocres y abalorios y realizaban pequeños signos, principalmente
líneas, sobre huesos y piedras.
Unas
capacidades que, como comenta Marcos García, "tradicionalmente sólo
venían siendo atribuidas a las primeras poblaciones de humanos modernos
surgidas en África hace 200.000 años y que llegaron a Europa hace unos
40.000".
Marcos García considera
ahora que las dos nuevas investigaciones dadas a conocer hoy en
"Science" implican "un replanteamiento de los modelos vigentes sobre el
origen del pensamiento simbólico y la expansión de las primeras
capacidades artísticas de los humanos".
No
obstante, Joao Zilhão va aún más allá al mantener que "los neandertales
en nada se diferenciaban, desde el punto de vista cognitivo y del
pensamiento simbólico, de las primeras poblaciones africanas de hombres
anatómicamente modernos" y que "estas características definidoras de
nuestra especie aparecieron en las etapas iniciales de la evolución
humana, hace más de medio millón de años", informa Efe.
El
autor principal, Dirk Hoffmann, del Instituto Max Planck de
Antropología Evolutiva, añade que la cultura material simbólica, una
colección de logros culturales e intelectuales transmitidos de
generación en generación, hasta ahora, solo se ha atribuido a la especie
'Homo sapiens'.
"El surgimiento
de la cultura material simbólica representa un umbral fundamental en la
evolución de la humanidad. Es uno de los principales pilares de lo que
nos hace humanos. Los artefactos cuyo valor funcional radica no tanto en
su uso práctico sino más bien en su uso simbólico son representantes de
los aspectos fundamentales de la cognición humana tal como la
conocemos", indica.
Los
primeros artefactos simbólicos, que datan de hace 70.000 años, se han
encontrado en África, pero están asociados con los humanos modernos.
También se han hallado otros artefactos, como arte rupestre, figuras
esculpidas, herramientas de hueso decoradas y joyas en Europa, que datan
de hace 40.000 años. Pero los investigadores han concluido que estos
artefactos deben haber sido creados por humanos modernos que se estaban
extendiendo por toda Europa después de su llegada de África.
Existe
evidencia de que los neandertales en Europa usaron ornamentación
corporal hace unos 40.000 a 45.000 años, pero muchos investigadores han
sugerido que esto fue inspirado por los humanos modernos que en ese
momento acababan de llegar a Europa.
"Los neandertales crearon símbolos significativos en lugares significativos. El arte no es un accidente aislado. Tenemos
ejemplos en tres cuevas separadas por 700 kilómetros y evidencia de que
fue una tradición longeva. Es muy posible que el arte rupestre similar
en otras cuevas en Europa occidental también sea de origen neandertal",
concluye el coautor del estudio Paul Pettitt, de la Universidad de
Durham, Reino Unido.
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