Por: Arnaldo Liechtenstein, médico.*
Siempre que doy clases de clínica
médica a estudiantes del cuarto año de Medicina, hago la siguiente pregunta.
¿Cuáles son las causas que más hacen QUE LAS PERSONAS DE LA TERCERA EDAD tengan
confusión mental? Algunos arriesgan: "Tumor en la cabeza". Yo les
respondo: ¡No! Otros apuestan: "Síntomas iniciales de Alzheimer"
Respondo, nuevamente: ¡No! A cada negativa, la concurrencia se espanta. Y
quedan aún más boquiabiertas cuando enumero las tres causas responsables más
comunes:
- Diabetes descontrolada;
- Infección urinaria;
- Deshidratación
Parece broma, pero no es. Constantemente,
las personas mayores de 60 años dejan de sentir sed y dejan de tomar líquidos. Cuando
no hay nadie en casa para recordarles tomar líquidos, se deshidratan con
rapidez. La deshidratación es grave y afecta a todo el organismo. Puede causar
confusión mental abrupta, caída de presión arterial, aumento de las
palpitaciones cardíacas,
angina (dolor en el pecho), coma y hasta
muerte.
Insisto: ¡No es broma! En el mejor de los
casos, este olvido de tomar líquidos comienza a los 60 años de edad,
cuando tenemos poco más del 50% de agua que deberíamos tener en el
cuerpo. Esto forma parte del proceso natural de envejecimiento, no aludo a
nadie específico.
Por lo tanto, las personas mayores de 60
años tienen una menor reserva hídrica.
Pero hay más complicaciones: aún
deshidratados, ellos no sienten ganas de tomar agua, pues sus mecanismos de
equilibrio interno no funcionan muy bien.
Conclusión:
Las personas mayores de 60 años se
deshidratan fácilmente no sólo porque poseen una reserva hídrica más pequeña,
sino también porque no sienten la falta de agua en su cuerpo.
Aunque las personas mayores de 60 años se
vean saludables, queda perjudicado el desempeño de las reacciones químicas y
funciones de todo su organismo.
Por eso, aquí van dos alertas:
1) Hagan voluntario el hábito de beber
líquidos. Por líquido, entiéndase el agua, jugos, tés, agua de coco, leche,
sopas, gelatina y frutas ricas en agua, como sandía, melón, melocotones, piña;
la naranja y mandarina, también funcionan. Lo importante es, cada dos horas,
tomar algún líquido. ¡Recuérdense de eso!
2) Alerta para los familiares: Ofrézcanles
constantemente líquidos a las personas mayores de 60 años. A la vez, sean
atentos con ellos. Al percibir que están rechazando líquidos y, de un día para
el otro, están confusos, irritados, les falta el aire, muestran falta de
atención, es casi seguro que sean síntomas recurrentes de deshidratación.
*Arnaldo Liechtenstein (46), MD, es
clínico-general del Hospital de Las Clínicas y profesor colaborador del
Departamento de Clínica Médica de la Facultad de Medicina de la Universidad de
São Paulo (USP).