Tomado
de Noticiero Digital.
El sacerdote jesuita Miguel Matos, de la
Pastoral de Fe y Alegría de la zona Caracas-Litoral, aseveró que la situación
actual por la cual atraviesa Venezuela “llega casi al genocidio”. Consideró que
las “políticas torpes” de los últimos años han llevado al país a esta
situación.
Durante
el programa Diálogo con, transmitido por
Televen, dijo: “La situación social que estamos viviendo llega casi al
genocidio. Estamos viviendo una situación no solo inédita, sino una situación
en la cual el camino te lleva a la desesperación. En las escuelas Fe y Alegría
no es raro encontrar niños que se desmayan porque no han comido ni siquiera el
día anterior o niños que no van a la escuela porque los padres no los quieren
enviar sin nada en el estómago (…) La situación social es realmente trágica”.
Carlos
Croes señaló: “Sectores del Gobierno dicen que hay una guerra económica, ¿qué
piensa?”
“Yo
no niego que hay toda una estrategia nacional e internacional que crea
problemas sociales, pero yo no siento que esto sea consecuencia de una guerra
económica, esto es consecuencia de unas políticas realmente torpes, las cuales
hemos venido arrastrando desde hace años y nos han llevado a este callejón sin
salida. Pero la guerra económica, sin negar que existan episodios, no se le
puede culpar”, respondió el padre Miguel Matos.
Croes
preguntó: “¿Cuál es el sistema político que una persona como usted desearía
para el país?”
“Siempre
me ha parecido incluso más cercano al Evangelio de Jesús el socialismo, pero es
que los socialismos son tantos, que no se puede hablar del socialismo. Siento
que nosotros empezamos en Venezuela con un socialismo que tenía muchas
características de nuestra idiosincrasia, pero que poco a poco nos hemos
convertido en un socialismo, un estatismo que ha traído como consecuencia todo
el desastre económico, el desastre de la producción, el desastre de la
distribución, pero todavía sigo sintiendo que entre el neoliberalismo y un
socialismo bien vivido, el socialismo se acerca más al ideal de la felicidad de
todos los ciudadanos”, consideró.
“¿Qué
papel tendría el sector privado en ese socialismo?”, preguntó Croes.
“Un
papel fundamental (…) no son incompatibles. Hay Estados en los cuales hay una
opción con el socialismo y sin embargo el sector privado, la propiedad privada,
todo eso sigue funcionando sin los abusos de un neoliberalismo craso que sí es
contrario a la felicidad de los pueblos”, manifestó.
Por
otra parte, se refirió al papel del papa Francisco y a la posición de la
Iglesia venezolana con relación a la crisis en el país. “Se ve que (el papa
Francisco) no quiere darse por vencido con la situación venezolana (…) El Papa
insiste en esa negociación, en esa forma política de juzgar la situación y
buscar solución”.
“Por
otro lado, tenemos nuestra Iglesia venezolana, que es también víctima de la
polarización, no podemos imaginar una Iglesia ajena a lo que se está viviendo
en todo el país y hay esos episodios en los cuales de ambos lados, hay
sacerdotes que simpatizan con el Gobierno y de alguna manera actúan en
consonancia a su ideología, y otros que los contradicen y también tienen sus
actuaciones contrarias. A mí me parece que lo que hay que evitar ahí es esa
manipulación de lo religioso con respecto a lo político. Ni tiene razón un
sacerdote que simpatiza con el chavismo a meter en su lenguaje en su contacto
con los feligreses, sus ideas, ni tampoco el que está adversando al Gobierno
aprovechar su condición de sacerdote para imponer su ideología”, opinó.
A
su juicio, “la Conferencia Episcopal Venezolana se ha ido radicalizando y ha
ido exigiendo pasos más concretos y a mí me parece que es una dirección
acertada, acertada en cuanto a que va a tono con lo que la sociedad civil va
viendo, lo que se va viendo como necesidad de exigir, en este caso exigirle al
Gobierno. Pero lo que no está bien es esa pugna ya a nivel de una eucaristía
que se te convierte en un acto político de cualquier signo, eso no está bien”.