... y siguen los escándalos
La mujer de Arístegui Nadia Jalfi ayudó al servicio secreto marroquí
Nadia Jalfi agente marroquí que trabaja para los Servicios Secretos de Espionaje Exterior Marroquíes, esposa del embajador de España en la India, Gustavo Aristegui |
IGNACIO CEMBRERO Foto. P. ROY | H. TIMES
- · Desvelados unos 150 correos de la esposa del ex portavoz de Exteriores del PP
- · Los 'e-mails' trataban de temas como la imagen en prensa del conflicto del Sáhara
- · Su contacto era el jefe de Gabinete del responsable de inteligencia exterior marroquí
- · Rabat ha bloqueado la difusión de los mensajes en Twitter, pero no los desmiente.
El diplomático y cineasta español «nos propone plasmar en imágenes, de
manera pertinente, la soberanía histórica de Marruecos sobre el Sáhara.
Asegura poseer documentos inéditos sobre el asunto. No hace falta
explicar el provecho que podríamos sacar de un proyecto de esta
naturaleza».
La que escribe estas líneas en Rabat desde su correo de Yahoo, al regresar de un viaje a Madrid a finales de 2008, es Nadia Jalfi. Se las envía a una de las tres direcciones de correo electrónico abiertas por Mourad el Ghoul. Éste es el jefe de Gabinete del director de la Dirección General de Estudios y Documentación (DGED), el servicio secreto exterior marroquí. La visita a Madrid, recuerda en el mensaje, la ha efectuado tras obtener «el acuerdo de principio» de El Ghoul.(...)
El perfil anónimo que desde el 2 de octubre ha desvelado, a través de
Twitter, cientos de documentos y correos electrónicos confidenciales de
la diplomacia marroquí y de la DGED colgó el 16 de enero unos 150 correos enviados o recibidos, entre 2008 y 2011, por Nadia Jalfi y El Ghoul.
Ambos se tutean y se escriben en francés. De su lectura se deduce que
durante esos tres años Jalfi mantuvo una estrecha relación con la DGED.
Poco después de esta publicación, Twitter suspendió la cuenta del que
usurpaba el nombre del entrenador de la selección de Gales (@chris_coleman24).
Las autoridades marroquíes hicieron gestiones para que ese perfil fuese
cerrado, pero no han desmentido la autenticidad de los documentos que
sacó a la luz. Sólo un empresario de prensa marroquí, Ahmed Charai, que aparece en cientos de correos, ha escrito que habían sido manipulados, pero sin precisar en qué.
Nadia Jalfi contrajo matrimonio, en octubre de 2010, con Gustavo de Arístegui,
de 51 años, entonces portavoz de Asuntos Exteriores del Grupo Popular
en el Congreso de los Diputados. Su relación sentimental había empezado
dos años antes. De Arístegui es desde 2012 embajador de España en la India.
'Empleo de rango medio'
«Nadia desempeñaba un empleo de rango medio en una agencia de
comunicación, en Rabat, que recibía encargos de administraciones y
empresas privadas», asegura una persona allegada a la esposa del
embajador y designada por ella para responder a las preguntas de EL
MUNDO.
«Mantenía correspondencia con múltiples
clientes, pero no conoce al tal El Ghoul», añade esa misma fuente, que
desmiente cualquier relación con la DGED. «Algunos de los correos
publicados han sido manipulados», precisa, sin explicar en qué. «Buena
parte de sus clientes querían que les ayudara a promocionar, a través de
la prensa europea, eventos que se celebraron en Marruecos como, por
ejemplo, el Festival de Cine de Marrakech», señala.
Nadia Jalfi «dejó de trabajar para esa agencia en 2008, aunque hizo aún
alguna colaboración esporádica en 2009», prosigue la misma persona. «Si
han aparecido correos posteriores es probablemente porque, por rutina,
algunos de sus interlocutores seguían dirigiéndose a ella», sospecha.
«Nada de lo que ella hizo es extraño o ilegal», recalca.
Nadia Jalfi trabajó esos años para la agencia Mena Media Consulting, que
perteneció al hombre de negocios saudí Othman Al Omeir, con inversiones
en prensa en Marruecos. Más tarde, la agencia fue comprada por Fouad
Ali el Himma, brazo derecho del rey Mohamed VI, según medios de
comunicación marroquíes.
Una parte de la actividad profesional de
Nadia Jalfi estuvo dedicada a tratar de dar a conocer aspectos positivos
de Marruecos, ofreciendo, por ejemplo, a emisoras de radio españolas
hacer en directo desde Rabat sus programas estrella. Cursaba estas
invitaciones coordinándose con El Ghoul, según se desprende de los
correos divulgados.
Otras invitaciones estuvieron dirigidas a directivos de periódicos
españoles y consistieron en un viaje relámpago a Rabat para mantener una
larga conversación informal con Yassine Mansouri, director de la DGED. En una ocasión, El Ghoul presentó a Nadia Jalfi ante un interlocutor francés como la «agregada de prensa» encargada de preparar la visita y acompañar al periodista.
El Sáhara, tema recurrente
El Sáhara Occidental, esa antigua colonia española en manos de Marruecos
desde hace casi 40 años, ocupa mucho espacio en la correspondencia de
Nadia Jalfi. El 16 de octubre de 2008 envió un correo a El Ghoul para
que éste lo aprobase y lo publicase la agencia de prensa oficial (MAP).
En él cuenta la visita a Rabat de Pedro Sanz, presidente de La Rioja,
que ella ayudó a organizar. El huésped español opina que «la solución
más lógica y la única viable para resolver el conflicto del Sáhara es
una amplia autonomía», como la propuesta por Marruecos.
El 17 de diciembre de ese mismo año, Nadia Jalfi recibe un correo de un
periodista de la revista italiana Tempi, cuya visita al Sáhara ella
también ha dispuesto. Le anuncia que cumplirá su promesa publicando un
reportaje «de tres páginas dedicado a los ex del Polisario que se han
incorporado a Marruecos tras malas experiencias en los campamentos» de
refugiados.
Dos años después, el 18 de diciembre de 2010,
El Ghoul señala a Nadia Jalfi que la televisión estadounidense Fox News
ha colgado por fin en su web un artículo «sobre los nexos entre el
Polisario y Al Qaeda en el Magreb Islámico». Le insta a que lo «divulgue
al máximo con sus contactos». Un mes antes, el coordinador
antiterrorista del Departamento de Estado, Daniel Benjamin, había
negado, sin embargo, que el Polisario tuviera vínculos con el
terrorismo.
«¿Podrías movilizar a tus contactos mediáticos en Francia para que
hablen y cubran el acontecimiento?», pide El Ghoul a Nadia Jalfi el 12
de enero de 2011, en uno de los últimos correos que intercambian. Se
trata de que los medios franceses se hagan eco de la conferencia de
prensa que el abogado Michel de Guillenchmidt dio el 17 de enero para
denunciar «la odiosa manipulación» de la prensa española.
Tras el desmantelamiento del gran campamento de protesta saharaui de
Gdeim Izik en noviembre de 2010, la agencia Efe y varios diarios
españoles (EL MUNDO, El País, La Vanguardia, etcétera) publicaron una
foto de niños palestinos en un hospital de Gaza haciéndola pasar por
críos saharauis en el Hospital de El Aaiún. En el flujo de instantáneas
enviadas a la prensa por particulares desde el Sáhara, vetado para la
prensa extranjera, se coló esa fotografía. La mayoría de los periódicos
reconocieron su error y se disculparon ante sus lectores.
Las autoridades marroquíes no se conformaron con eso. Encargaron a la
DGED que buscase en Gaza a dos padres y un niño palestino que salió con
vida y que los trasladase a Rabat, donde manifestaron su indignación por
la manipulación. En el Consulado de España obtuvieron visados Schengen
con los que viajaron a Madrid, París y Bruselas, donde dieron
conferencias de prensa, acompañados de abogados, y pusieron una
querella.
«Si Nadia hubiese sido española o italiana, no habría estado a las órdenes de un espía», opina un ex agente secreto español. «En
Europa, si los poderes públicos quieren hacer lobby en el extranjero
para mejorar su imagen sobre un determinado asunto no recurren a un
servicio secreto», añade. «Pero en Marruecos es diferente; en cuanto se toca el Sáhara los servicios están omnipresentes», concluye.