Nuestras axilas se ven expuesta a manchas por el desodorante y a grietarse con el tiempo, lo que nos hace ver fatal. Para evitar el oso, solo necesitas 3 cosas:
-Bicarbonato de sodio
-Un limón
-Agua oxigenada, preferiblemente de 30-40 vol (o dependiendo la sensibilidad de tu piel)
¿Cómo se hace?
Primero exprimes la mitad del limón, añades la cantidad de bicarbonato que sea necesaria y el agua oxigenada, hasta que se convierta en una pasta. Mientras menos liquida mejor. Deja SOLO uno o un minuto y medio. Retira con abundante agua tibia.
Este proceso se puede repetir solo 1 vez por semana y luego del mismo no se debe aplicar nada durante 24 horas.
Notaras como tus axilas se vuelven tu mayor orgullo