El sur cambió
El pasado 14 de abril
cambió radicalmente la vida política en el sur de la ciudad de Valencia que
hasta ahora había sido un bastión inexpugnable del “chavismo”. Una parte
significativa de los votantes del municipio Miguel Peña optaron por la oposición
esta vez (los cacerolazos sonaron tan fuertes como en el norte) y, esto parece
lógico, nuestra parroquia es una de las más afectadas por las calamidades que
sufre el pueblo venezolano; aquí es donde la inseguridad es mas fuerte, donde
hay más desempleo, donde es mayor el aumento del costo de la vida y donde hay
más escasez; de manera que la rebelión en el sur era solo cuestión de tiempo,
pareciera que de ahora en adelante habrá una nueva realidad que impactará
considerablemente la vida económica, social y política de la capital
carabobeña.
La Aranzazu otra vez
Por décadas la
construcción de la Av. Aranzazu ha sido un relajo de los habitantes de la zona
sur de Valencia y por años los políticos que han gobernado la ciudad y el
estado han prometido construir esta importantísima arteria vial; sin embargo,
esta promesa nunca ha sido cumplida. Cuando se acercan los procesos
electorales, a la carrera, inauguran un pequeño tramo para hacer ver a la
población, sobre todo a los votantes, que están interesados en resolver los
problema del sur, pero la verdad es que no, solo quieren nuestros votos. La
Valencia del sur necesita gente que defienda sus intereses, que luche para que
de una vez por todas la Av. Aranzazu sea construida de cabo a rabo, como nos
merecemos los que aquí vivimos que también somos valencianos de primera. La
pelea por la construcción de la Aranzazu está más vigente que nunca.