La “Carta a la juventud”, documento con el cual el científico Jacinto Convit respondió a sus críticos, es una lección para los que anteponen la mezquindad e intereses personales y políticos, ante las iniciativas orientadas al desarrollo y bienestar humano.
Convit, reconocido mundialmente por la creación de la vacuna contra la lepra, anunció en fecha reciente los avances de su investigación sobre una inmunoterapia del cáncer, labor que ejecuta con un grupo de jóvenes. Luego las autoridades sanitarias del país manifestaron el apoyo a este trabajo científico.
Eso bastó para que se desatara una serie de cuestionamientos sobre la investigación. En la carta Convit llama a dejar el lenguaje depresivo, a confiar en los jóvenes y a cambiar de actitud sobre el futuro del país. Realmente, eso hace falta.
