Vistas de página en total

05 octubre, 2009

Pedro Martínez, concejal de Carlos Arvelo: LAS CONTRADICCIONES SOCAVAN LA REVOLUCIÓN

A más de un año de ser sacado a la fuerza de la cámara municipal
y ser ordenada su reincorporación por un tribunal, al edil se le impide
asumir su curul y llama la atención de las autoridades del PSUV, incluido
el presidente Chávez, para que se restituya el estado de derecho en Carlos Arvelo y no se siga atentando contra el proceso bolivariano

La historia
A mediados de 2008 cinco de los nueve concejales del municipio Carlos Arvelo del estado Carabobo fueron expulsados de la sede municipal, en forma violenta y utilizando todo tipo de agresiones, por parte de un grupo de funcionarios de esa cámara y de la alcaldía. Los afectados fueron Carlos Botello, presidente del Concejo Municipal, Carmen León, Mary Rodríguez, Pedro Martínez, todos del PSUV y José Vera, de Podemos. Los otros cuatro ediles, junto a los suplentes que fueron convocados, conformaron una nueva directiva presidida por Julio González. Se consumó un golpe de estado.
En un principio se vio el caso como un enfrentamiento interno entre grupos del PSUV, sin embargo, el problema tomó un carácter más grave, no ocurrió una simple disidencia, una expulsión de militantes de un partido, se desconoció la voluntad popular, arbitrariamente se destituyó a concejales electos por el pueblo, se violentó el estado de derecho, la institucionalidad. Lo más preocupante es que ese atentado a la democracia no pareció importarle a nadie.
Consumado el golpe de estado, los afectados recurrieron a la vía legal, de inmediato solicitaron un recurso de amparo con medida cautelar en el Tribunal Contencioso Administrativo de la Región Centro Norte. Este mismo tribunal, en un caso igual ocurrido en julio de 2008, en Tinaquillo, estado Cojedes, decidió en 20 días la reincorporación de los concejales destituidos ilegalmente, sin embargo, fue en octubre del mismo año que el juez Oscar León Uzcátegui decidió que el recurso de los concejales de Carlos Arvelo era inadmisible y que éstos tenían que solicitar un recurso de nulidad. Así se hizo y nueve meses después, el 8 de julio de 2009, el juez declaró con lugar el recurso y ordenó la reincorporación de los concejales a sus cargos.
Esto no se ha podido cumplir por la negativa de la directiva usurpadora, con un Juzgado de Municipio se dejó constancia que a los concejales no se les permitió entrar al recinto municipal. El grupo que se instaló hace más de un año en ese Concejo Municipal dice que no acatan la orden del juez porque ellos van a apelar. Así de sencillo.

Las contradicciones
El concejal Pedro Martínez se define como un revolucionario, defensor del proceso bolivariano que lidera el presidente Hugo Chávez. Ha consignado informes, evidencias, pruebas, etc., en diversas instancias de su partido, sin que hasta ahora haya pronunciamiento alguno sobre este caso. Igualmente se ha dirigido a organismos como la Fiscalía General de la República y la Contraloría General, de ésta última recibió una comunicación firmada por la Directora de Control de Municipios, Adda Vivas, dirigida a “Carlos Botello, presidente y demás miembros del Concejo Municipal del municipio Carlos Arvelo”, que indica que están en conocimiento de la “presunta existencia de conflicto de autoridad y dualidad de directivas”, pero señala que de acuerdo a los artículos 148 de la Constitución y 4 de la Ley Orgánica del Poder Público Municipal, “los actos de los Municipios no podrán ser impugnados sino por ante los tribunales competentes”.
-Si ya existe la decisión de un tribunal y ésta no se acata, ¿qué queda por hacer?
-Apelar a la dirigencia política, a la dirección regional y nacional del PSUV, como militante de ese partido he cumplido con todos los reglamentos internos para dar a conocer los hechos y exigir que cese la violencia y el irrespeto a las leyes. No quisiera pensar que esa dirigencia está parcializada, que avala los atropellos y el desconocimiento de la ley. Así como se ha denunciado el golpe de estado en Honduras, la justicia debe entrar por casa, en Carlos Arvelo también ocurrió un golpe contra la institución municipal y debe condenarse si en verdad somos demócratas y revolucionarios.
-Ese silencio de la dirigencia puede interpretarse como jugar al cansancio, como medida de presión para que usted calle en sus reclamos…
-Se juega a todo, hasta a la necesidad que uno tiene de percibir recursos para el sustento, por ley no puedo buscar un empleo pues respeto la ley, y soy concejal. Son muchas las explicaciones que tiene que dar la dirección del PSUV, no es sólo el caso de Carlos Arvelo, ¿qué explicación le da el PSUV a los familiares de la camarada Carmen Carrera?, ella falleció esperando que se hiciera justicia pues al igual que nosotros fue expulsada del Concejo Municipal de Libertador hace tres años, sin recursos económicos soportó una enfermedad renal. Las dos concejalas atropelladas en Carlos Arvelo también son diabéticas y no ha habido consideración con ellas. Eso de despojar de sus curules a los concejales que no se pliegan a los caprichos y arbitrariedades de algunos alcaldes ya se ha vuelto una mala práctica en Carabobo, acaba de repetirse en Puerto Cabello donde dos concejales pactaron con el alcalde para expulsar a siete ediles, es algo insólito. A palo limpio se está acabando con la democracia. Yo sigo en la pelea, no me voy a arrodillar, mi formación ideológica está muy por encima de cualquier necesidad material.
-Si estuviera frente al presidente del PSUV, frente a Hugo Chávez, ¿qué le diría?
-A Chávez le pido que intervenga al partido a nivel regional. Y no es por mi caso, es que duele ver al partido convertirse en una nueva Acción Democrática. Si somos revolucionarios debemos ser autocríticos. Se está traicionando a la revolución, al proyecto del presidente Chávez. Como ejemplo, veamos lo que ocurre en la alcaldía de Carlos Arvelo, hasta ahora no se le han entregado recursos a los Consejos Comunales, a pesar de haberse promulgado una ordenanza no se han entregado títulos de tierras, mientras alcaldías de oposición si lo han hecho. Las conductas de la alcaldesa y de los que usurpan el Concejo Municipal actual son evidentes, ni siquiera se pronuncian a favor de las nuevas leyes aprobadas en la Asamblea Nacional, esa actitud no es nueva pues la alcaldesa Marisol Castillo el 19 de octubre de 2007 vociferaba que quien votara SI en la reforma “se pondría cuchillo en su propia garganta”. Esas no son conductas de revolucionarios.
-¿Qué originó la discrepancia entre el grupo de concejales expulsados y los que siguieron la línea de la alcaldesa?
-El concurso para la selección del nuevo Contralor Municipal. Hay hechos de corrupción evidentes en la Alcaldía, avalados por la Contraloría. Eso no podemos callarlo. La revolución no se construye con corrupción.

NO ME CONTROLES

El origen de la cadena de atropellos que se vienen cometiendo en los Concejos Municipales de Carabobo y de otras entidades del país, para imponer a como de lugar directivas de cámaras municipales obedientes a los mandatos de los alcaldes, está en la resistencia de éstos a someterse a un control imparcial de sus gestiones, como establece la ley.
Como ilustración tomemos el caso del municipio Carlos Arvelo.
A principios de 2008 el Concejo Municipal de Carlos Arvelo, presidido por el concejal Carlos Botello, acordó convocar un concurso público para designar al nuevo Contralor Municipal. Los miembros del Jurado Calificador, por parte del Concejo Municipal y de la Contraloría del estado Carabobo, fueron designados el 28 de junio de 2008 y se cumplió la primera fase con la convocatoria, a través de la prensa regional, para participar en el concurso.
Ahí vino el golpe, se conformó la cámara paralela para evitar la evaluación de las credenciales de los concursantes por parte del jurado.
Es de hacer notar que la Contraloría General de la República ya ha enviado tres exhortos al Concejo Municipal de Carlos Arvelo para que se realice el concurso para la escogencia del Contralor Municipal. La primera de estas comunicaciones, fechada el 16-08-08, señala que conformado el Jurado Calificador y realizada la convocatoria, “es de advertir que todos los actos efectuados tienen un alto costo para el presupuesto municipal, motivo por el cual no se justifica que el mismo sea paralizado…, en tal sentido se exhorta a continuar con el Concurso Público a los fines de que sea designado el Titular de dicha Contraloría Municipal, retrotrayéndose a la fase de la juramentación del Jurado Calificador, de tal manera de que exista validez y confiabilidad en los resultados emitidos”.
El concejal Pedro Martínez solicitó a la Contraloría General de la República el informe de las auditorias efectuadas por ese organismo en la Alcaldía y Contraloría Municipal de Carlos Arvelo durante el año 2008. El 4 de abril de 2009 la Dirección de Control de Municipios le entregó copia certificada de esos informes que detallan cierta cantidad de deficiencias administrativas, se destaca la no designación del Contralor titular y del Auditor interno por concurso público, debilidades en los sistemas de control interno, erogaciones sin el debido soporte, adquisición de bienes por montos superiores a los existentes en el mercado, pagos por elaboración de manuales inexistentes, aprobación de beneficios laborales que benefician mayormente a las autoridades del organismo, etc. Todo esto junto a otras denuncias de malversación de fondos consignadas por Martínez, confirman que el conflicto se genera para evitar el control.
Así las cosas, imperando el desacato a la ley, concejal que quiera conservar su cargo debe atender la advertencia de los alcaldes: no me controles.