El Jefe de Estado boliviano brindó
detalles sobre lo que sucedió entre el 25 y 26 de junio. Señaló que el ‘general
del pueblo’ fue destituido el martes por la noche, tal como lo anticipó EL
DEBER. El Grupo de Puebla buscó acercar a los líderes del MAS.
Diego Seas, Mauricio Quiroz Terán.
Tienen
diferencias serias sobre el futuro del Movimiento Al Socialismo (MAS), pero el
presidente Luis Arce optó por hablarle; rompió el silencio y se comunicó con
Evo Morales, el líder político que asegura que volverá a ser candidato a la
presidencia en los comicios de 2025, a pesar de los límites legales.
“Podemos tener diferencias y la principal que tenemos es que creemos que el instrumento político pertenece a las organizaciones sociales y no a ninguna persona en particular. Eso no quiere decir que, en esos momentos cuando vimos que ya venía el golpe de Estado (...), que (no) me comunicaran con el compañero Evo. Le he prevenido que aquí venía un golpe de Estado para que él tome sus recaudos”, reveló el mandatario en una prolongada rueda de prensa con medios nacionales y enviados especiales de medios de comunicación del exterior.
Según el
mandatario, “estaba claro” que el objetivo de Zúñiga era, además de tomar el
poder, detener a Morales. “(Los militares) venían por mí, pero a mí
también me quedaba claro que después iban a ir por Evo Morales”, remarcó
Luis Arce en la Casa Grande del Pueblo de La Paz.
Evo
Morales y Luis Arce no habían intercambiado criterios ni se habían reunido
desde hace más de un año. La última vez que conversaron fue durante un evento
deportivo en el Trópico de Cochabamba. Es más, las diferencias entre ambos se
habían acentuado en el contexto de la disputa política por el control de
la dirección del MAS y de la elección del próximo candidato a la
presidencia en representación de ese partido.
“(Se lo
dije) como compañero, porque al final eso es lo que somos y le llamé para
prevenirle y que tome sus recaudos. Fue una comunicación muy corta y muy rápida
porque, en ese momento, yo tenía todos los teléfonos sonando, todos los
mensajes llegando a los diferentes celulares y teníamos que estar
organizándonos para poder enfrentar a la asonada golpista. Fue una
conversación de segundos nada más, donde yo le pasé esa información para
que él tome sus recaudos”, ratificó Arce.
Zúñiga,
que en varias ocasiones se había pronunciado en favor del Gobierno, esta semana
volvió a expresar ese apoyo. Primero, en una entrevista con la periodista
Jimena Antelo, rechazó la candidatura de Evo a la presidencia y anticipó la
posibilidad de detenerlo. Luego, en una entrevista con EL DEBER, lamentó que el
país haya ingresado en una etapa preelectoral y cuestionó los intereses a “los
caudillos”.
El día
de la asonada, Morales, a través de sus redes sociales, alertó de un
acuartelamiento. Además, el Grupo de Puebla, un foro político de
izquierda, solicitó al presidente Arce “mantener la no intervención militar en
política” y pedía “a la comunidad internacional que denuncie cualquier intento
de intervención en el proceso electoral, en referencia. “Expresamos nuestra
preocupación por las declaraciones (...) que amenaza con impedir una
candidatura de Evo Morales en 2025”, iniciaba el pronunciamiento de este
bloque.
Posteriormente,
la Cancillería publicó un comunicado que luego fue eliminado. El mensaje
rechazaba un “autogolpe. Evo y sus socios internacionales han venido
construyendo una narrativa, que hemos denunciado en los dos últimos meses,
que tiene el objetivo de acortar el mandato del presidente constitucionalmente
elegido”, indicaba la nota que fue comentada en canales internacionales antes
de ser eliminada.
Pablo
Iglesias, un político español vinculado al Grupo de Puebla, opinó que las
acciones de Zúñiga tenían como base la crisis del MAS. “¿Arce saldrá o no
fortalecido? Al menos sí en el corto plazo, pero si bien es verdad que fueron
elementos legalmente bajo su mando o sublevados también es cierto que la
restauración del orden fue inmediata”, sostuvo.
En dicho
programa fue invitada la politóloga Susana Bejarano. Ella expresó que en esta
coyuntura la figura del presidente de la Cámara de Senadores, Andrónico
Rodríguez, puede ayudar a las paces entre el ‘arcismo’ y ‘evismo’ de cara a las
futuras elecciones presidenciales, sin embargo, considera que ambos bandos
llegarán separados.
Tomado de El Deber / Bolivia. Foto:
APG