El país centroamericano ya no es el mismo. En una noche, con
67 manos alzadas, pasó de tener 262 municipios a sólo 44.
Alba Miriam Amaya
El Salvador -aunque
es pequeño- siempre ha llamado la atención. Desde el siglo XX, su nombre ha
estado ligado a golpes militares; a la guerra civil; a masacres y a graves
violaciones de derechos humanos;
a la violencia delincuencial de las maras y, recientemente, a
los cambios que ha traído el Gobierno de Nayib Bukele y su partido "Nuevas
Ideas".
El presidente milenial lleva ya varios hitos con los que se
ha desligado de sus predecesores: ingresó con soldados fuertemente
armados al Congreso para presionar por un préstamo; instauró el Bitcoin como
moneda de curso legal; estableció un régimen de excepción con el que redujo los
históricos niveles de homicidios y, de paso, encarceló a miles de personas acusadas
de pertenecer a las pandillas (muchas de las cuales han muerto en custodia estatal);
además, y con los votos de sus aliados, cambió la división
político-administrativa del país.
Las "Nuevas Ideas" y sus novedades
El 1 de junio de 2023, Bukele anunció ante la Asamblea
Legislativa que enviaría una propuesta al Órgano Legislativo para reducir la
cantidad de municipios. Doce días después, el Parlamento de mayoría oficialista
aprobaba la Ley Especial para la Reestructuración Municipal con la que los 262
municipios con los que contaba "pasan a ser distritos y quedarán agrupados
por regiones en cada uno de los 14 departamentos, basado en los cuatro puntos
cardinales: norte, sur, este y oeste", según dijo el Congreso.
La Asamblea Legislativa aseguró que "con la aprobación
de la normativa, los diputados han hecho historia pues, desde hace 84 años, no
se aplicaba una división territorial en El Salvador". La entidad argumenta
que, con este cambio, "se reducirá la burocracia, habrá un ahorro de
gastos para el Estado, se mejorará la atención a los ciudadanos y se fomentará
la transparencia y la rendición de cuentas".
Ante esto, Bukele celebró el "voto democrático y
abrumador de la Asamblea Legislativa" e informó en redes sociales que ya
había sancionado la ley.
¿Hay "gerrymandering" en El Salvador?
"El problema no es que se redistribuyan los municipios.
El problema es que se hace a unos meses de la elección, sin participación
ciudadana y sin intensiones de fortalecer la democracia", declaró a DW
Eduardo Escobar, director ejecutivo de Acción Ciudadana. "Lo que provoca
este cambio es concentrar poder en el partido oficial, disminuir el ejercicio
del sufragio de la gente -porque ya no elegirá a todos sus funcionarios
municipales- y alejará al gobierno municipal de la población. En resumen, darán
más poder al presidente en los territorios", agregó.
"En 2024 hay elecciones generales y están cambiando las
reglas siete meses antes de la elección. ¿Por qué el cambio? Para asegurarse la
victoria electoral por medio de la reestructuración de las circunscripciones
municipales", añadió Escobar.
"La realidad es que va a generar mayor centralización y
control por una fuerza política. Esta estrategia, de modificar estas fronteras
políticas, responde a ‘gerrymandering' y se hace precisamente para ganar
control sobre ciertos territorios", concuerda Luis Villatoro Villaherrera,
presidente de la Asociación Transparencia, Contraloría Social y Datos abiertos
(TRACODA).
"El impacto es grave ya que las consecuencias van más
allá de modificaciones territoriales. Incluye el cambio de fórmula sobre
la elección de legisladores y
esto se traduce en menor representatividad de partidos, dejando una sola voz
que no necesariamente se traduce en la voz del pueblo", explicó a DW
Villatoro Villaherrera, quien augura que "esto puede tener un impacto
gigantesco en términos de gobernabilidad y aunar en la falta de acceso a la
transparencia".
"La experiencia internacional muestra que la ruta para
el desarrollo local es la descentralización y autonomía municipal. Eso no
excluye que se revise la división administrativa, pero en una amplia consulta
social. Acá vamos en sentido contrario a la experiencia internacional",
analizó Escobar.
Villatoro Villaherrera dice no recordar a "ningún país
en Latinoamérica que haya hecho una reducción del 80 % en sus divisiones
municipales. Nunca había visto una modificación tan grande como la que se está
dando aquí".
Mientras tanto, congresistas de "Nuevas Ideas" y
el mismo presidente se congratulan en redes sociales por "hacer
historia" en El Salvador.
Tomado de DW / Alemania.