Todas las semanas dedico parte de mi tiempo a caminar por diferentes sectores de la capital venezolana, y gracias a herramientas comunicacionales como el Blackberry y el Twitter, he podido establecer comunicación directa con los responsables de cada situación que puedo observar en las calles. La semana pasada se la dediqué a Baruta, lugar en el que vivo. Su alcalde, Gerardo Blyde tiene cuenta en Twitter (yo lo sigo) y pude comunicarme, unidireccionalmente, con él para hacerle llegar varias denuncias relacionadas con la recolección de basura cerca del barrio La Palomera y la caída de un muro de contención de un rio muy cercano al sector La Trinidad. Creo que al burgomaestre se le olvida una cosita, que el municipio Baruta no solamente es Prados del Este, La Trinidad, Las Mercedes y esos lugares donde los lujosos edificios y florecientes centros comerciales tienen lugar. Baruta –para quienes no la conocen- le debe su nombre al pequeño pueblo que lleva ese mismo nombre. Recientemente el alcalde Blyde construyó la sede de la alcaldía en el casco colonial del pueblo, como una forma de decir que él no olvida a su gente y los orígenes de Baruta. A pesar de esto, al alcalde no se le ve la cara sino en los medios de comunicación y los botes ilegales de basura que denuncié en Twitter siguen creciendo y creciendo cada vez más. Sólo recogen los desperdicios de vez en cuando, pero la gente tiene derecho a vivir dignamente y a ser atendidos como debe ser. Así que, señor Blyde, haga su trabajo como debe ser y atienda a las localidades de todo este hermoso municipio del que tanto habla.
